Hace pocas semanas, un vagabundo de la ciudad de Filadelfia, (EE.UU.) realizó un pequeño gesto de bondad que cambió su vida. Johnny Bobbitt Jr. no titubeó en gastar los últimos 20 dólares que tenía en su bolsillo para amparar a una vulnerable mujer sin saber que ella le devolvería el favor con creces.
Sola y a altas horas de madrugada, la joven Kate McClure se quedó sin gasolina en una carretera cercana a la zona donde vivía Johnny, veterano de la Armada de EE.UU. Pendiente de la situación, el buen samaritano se acercó a la aterrada mujer, le pidió que tuviera cuidado con las puertas de su auto, marchó hasta la gasolinera más cercana y regresó con el combustible.
Kate, agradecida con el sintecho, decidió crear una campaña de recaudación de fondos para cambiarle su vida. "Johnny no me pidió dinero, y yo no pude devolvérselo en el momento porque no tenía efectivo", escribió la joven, de 27 años, en GoFundMe.com, la página para la recaudación.
La meta inicial, de 10.000 dólares, fue batida en pocos días, y en menos de un mes el monto recaudado llegó a los 402.826 dólares. Con estos fondos, Johnny se ha comprado el carro de sus sueños, un Ford Ranger modelo 1999, y una casa nueva, que prometió mostrar pronto a los donadores.
"El sentimiento es algo indescriptible", escribió el exmilitar, añadiendo que donará parte de los fondos a organizaciones de ayuda humanitaria y a otros veteranos sin techo. "Seguiré agradeciéndoles a diario el resto de mi vida", expresó el generoso ciudadano, que tiene ahora la tarea por delante de conseguir un empleo digno.