Una persona murió y al menos 36 siguen desaparecidas como consecuencia de una explosión y el posterior incendio en un centro comercial de la ciudad filipina de Davao, informa el periódico The Philippine Star.
La alcaldesa de la ciudad, Sara Duterte-Carpio, ha anunciado que los bomberos han encontrado un cadáver y que no dieron ninguna esperanza a los familiares de las personas que quedaron atrapadas en el edificio: "Les dijeron que las probabilidades de que hayan sobrevivido son cero".
Según los reportes, la explosión se originó este sábado en la tercera de las cuatro plantas del centro comercial NCCC. Las personas que en esos momentos se encontraban en el edificio quedaron atrapadas por las llamas. La causa de la explosión aún está por esclarecer.
El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, y representantes de la Iglesia católica visitaron el lugar de la tragedia la noche del sábado para reunirse con los familiares de los empleados atrapados en el centro comercial y les pidieron que rezaran. Duterte fue alcalde de Davao durante varios años antes de ser elegido como presidente del país el año pasado.
El incendio más grave de la historia de Filipinas ocurrió en 1996. Entonces, una explosión en una discoteca de la capital del país, Manila, provocó la muerte de 162 personas.