Estados Unidos está interfiriendo en las conversaciones entre las dos Coreas, mientras Seúl espera que el diálogo tarde o temprano tenga como resultado la desnuclearización de toda la península, ha afirmado a RT el analista de seguridad Charles Shoebridge.
La intensificación de las conversaciones intercoreanas de esta semana indica un avance significativo en las frías relaciones entre las dos Coreas. Y si bien el deshielo en las relaciones fue bienvenido por Seúl, el reciente acercamiento produjo escepticismo entre los 20 ministros de Relaciones Exteriores del llamado Grupo de Vancouver, que debatieron en esa ciudad canadiense la posibilidad de aplicar nuevas sanciones contra Corea del Norte.
"Es particularmente irónico que mientras tiene lugar un deshielo de las tensiones entre el Norte y el Sur, en Vancouver los antiguos aliados de Corea del Sur estén tensando la cuerda, aumentando la retórica [bélica] y elevando la temperatura", ha indicado Shoebridge luego de que el grupo discutiera este martes la posibilidad de imponer nuevas medidas restrictivas unilaterales contra Pionyang.
EE.UU. continúa con la retórica bélica
Estados Unidos insiste en que no solo aplicará presión económica y diplomática, sino que también emitirá amenazas militares para obligar a Corea del Norte a desarmarse. Así, el miércoles, Seúl y Washington "reafirmaron su compromiso de seguridad con la defensa de Corea del Sur usando todas las categorías de sus capacidades militares", según el Ministerio de Defensa surcoreano, citado por la agencia Yonhap.
Los aliados también "acordaron continuar el despliegue rotativo de los activos estratégicos de EE.UU. en Corea del Sur y áreas cercanas mientras persistan las amenazas nucleares y de misiles de Corea del Norte".
La decisión de continuar con las amenazas militares llega el mismo día en que Donald Trumpexpresó sus dudas de que el diálogo con Pionyang pueda conducir a "algo significativo". El presidente estadounidense también advirtió que es "muy posible" que el enfrentamiento con Corea del Norte no tenga una solución pacífica.
Más probabilidades de paz sin Washington
Shoebridge ha criticado la política exterior de Washington y ha señalado que Seúl y Pionyang pueden lograr mucho más si Estados Unidos deja de interferir en su "considerable logro diplomático".
"Las conversaciones intercoreanas se iniciaron sobre la base de que Corea del Sur acordara convencer a Estados Unidos para que al menos detuviera sus ejercicios militares", ha recordado Shoebridge.
"Cuando los intereses, la política exterior y las acciones de Estados Unidos se ponen a un lado, los actores locales son, al menos hasta cierto punto, capaces de comenzar a encontrar soluciones locales y de hacer algún progreso para garantizar sus intereses locales, que generalmente son la paz y la estabilidad", ha mantenido el analista.
Mentalidad de Guerra Fría
China y Rusia, dos de los principales actores regionales que no fueron invitados a participar en el encuentro de Vancouver de esta semana, criticaron la perspectiva pesimista de Estados Unidos sobre el proceso diplomático de Corea.
Los participantes reunidos en Canadá rechazaron la hoja de ruta de "doble congelación" propuesta por Moscú y Pekín para aliviar las tensiones en Corea, pero no ofrecieron ninguna alternativa, afirmó un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia.
Pekín también criticó la cumbre de Vancouver diciendo que fue impulsada por "una mentalidad de Guerra Fría". "Todas las partes deben valorar el impulso de aliviar la tensión en la península, ganado con mucho trabajo, y apoyar los esfuerzos realizados por Corea del Norte y Corea del Sur para mejorar los vínculos y duplicar su compromiso para aliviar la situación y promover los diálogos", indicó el miércoles el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Lu Kang.
El plan de "doble congelación" propuesto por Moscú y Pekín —mediadores clave en la crisis norcoreana— en julio de 2017 consiste en que Corea del Norte detenga su programa nuclear a cambio de que EE.UU. y Corea del Sur congelen sus ejercicios militares conjuntos.
El deshielo en las relaciones entre las dos Coreas llega luego de que el líder norcoreano, Kim Jong- un, propusiera la reconciliación en un mensaje de Año Nuevo a Seúl. La iniciativa surgió tras una serie de ensayos nucleares y de misiles realizados a lo largo del año pasado.