El Gobierno venezolano rechazó, a través de un comunicado publicado este lunes, las sanciones impuestas contra siete altos funcionarios por parte de la Unión Europea (UE).
La acciones en contra de los altos cargos venezolanos fueron catalogadas por Caracas como "indignas" y como de "grosera injerencia" en los asuntos internos de ese país suramericano.
En el texto publicado por el Gobierno venezolano se afirma que la UE "vuelve a ofrecer pruebas irrefutables de su notable subordinación" al gobierno de Donald Trump.
Además, responde que "esta conducta obsesiva hacia Venezuela, arrastra a la Unión Europea a infringir sus propios principios fundacionales".
Más sanciones
En noviembre del año pasado, desde Bruselas se aplicó un embargo de armas contra el país latinoamericano durante las protestas violentas organizadas por la oposición que dejaron una cifra de más de 130 personas fallecidas.
Estas sanciones de la UE se unen a las impuestas por Washington en contra de unos 30 altos funcionarios venezolanos, incluido el presidente Nicolás Maduro, que prohíben, además, hacer negocios con las nuevas emisiones de deuda y acciones de Venezuela o de su empresa petrolera estatal PDVSA.
Maduro ha catalogado esta medidas punitivas como un "bloqueo económico y financiero", que ha impedido la importación de productos esenciales y el pago de los compromisos de Venezuela en el exterior.