El caso Skripal fue únicamente una excusa para llevar a cabo una provocación planificada contra Moscú, ha declarado el embajador ruso en EE.UU., Anatoli Antónov.
"Los eventos en el Reino Unido fueron solo un pretexto para poner en práctica una provocación planificada durante mucho tiempo contra la Federación Rusa. Hemos observado de cerca quién visitó recientemente la Embajada de EE.UU. en Moscú. ¿Qué tipo de personas eran? Se trataba de personas de un centro de crisis, de la sección británica del Departamento de Estado. Todas estas provocaciones estuvieron siendo preparadas durante más de tres semanas", reveló Antónov en una entrevista a un programa de la cadena rusa Piatyi Canal.
Esta semana, el embajador ya denunció que existían sospechas de que Washington y Londres coordinaron y planearon la crisis diplomática con Moscú y que el caso Skripal solo era un detonante.
"La escala del daño infligido y la campaña de información que le precedió sugieren que lo más probable es que se planificara con antelación, y que simplemente fue pospuesto para el momento adecuado", aseveró Antónov, según le cita la embajada a través de su cuenta en Facebook.
60 diplomáticos rusos fueron obligados a abandonar EE.UU. como resultado de la crisis diplomática que detonó tras el envenenamiento del exagente doble ruso Serguéi Skripal y su hija Yulia a inicios del mes de marzo en Reino Unido, un incidente cuya autoría Londres atribuyó rápidamente a Moscú sin presentar pruebas al respecto.
La Cancillería rusa alertó este sábado sobre el apoyo "mutuamente beneficioso" que la Inteligencia estadounidense estaba ofreciendo a sus diplomáticos expulsados previo a su salida del país norteamericano. Antónov señaló que estos casos equivalen a intentos de "forzarles a traicionar a su país".