Al menos ocho personas, incluidos tres menores de edad y un agente de Policía, resultaron heridos en los choques que estallaron en la ciudad brasileña de Curitiba, donde este sábado fue detenido el expresidente Lula da Silva tras entregarse a la Policía Federal, informan medios locales.
Cientos de simpatizantes del exmandatario se congregaron cerca del edificio de la sede de la Policía Federal para protestar contra su detención, siendo dispersados por los agentes, que usaron balas de goma.
Según el portal Folha de Sao Paulo, un niño y dos adultos fueron hospitalizados.
Este jueves el juez Sérgio Moro ordenó el arresto del expresidente después de que el Supremo Tribunal Federal del país rechazara el pedido de 'habeas corpus' presentado con carácter preventivo por sus abogados, en un caso de presunta corrupción por la adquisición de un departamento triplex en el Condominio Solaris, en Guarujá (municipio del estado de São Paulo), a cambio de beneficiar a la constructora OAS en sus contratos con la estatal petrolera Petrobrás.