Moscú ha obtenido nuevos datos reveladores sobre la sustancia utilizada para envenenar a Serguéi y Yulia Skripal gracias al Centro suizo de análisis radiológico, bacteriológico y químico, situado en la ciudad de Spiez, ha anunciado el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, en la XXVI Asamblea del Consejo de Política Exterior y de Defensa. La información se ha obtenido en condiciones de confidencialidad.
El 27 de marzo de este año, los expertos de este centro culminaron la investigación de las muestras que les habían sido enviadas por la OPAQ después de haber sido recogidas en el lugar del incidente. "Tras el análisis realizado, en las muestras se han hallado rastros de la sustancia química tóxica BZ y de su precursor, que pertenecen a la segunda categoría de armas químicas de acuerdo con la Convención sobre las Armas Químicas", ha citado Lavrov las conclusiones del Centro helvético, que fueron enviadas a la OPAQ.
El ministro ha precisado que de acuerdo con las conclusiones del centro, BZ es un agente nervioso que afecta temporalmente a la persona. Su efecto empieza 30-60 minutos después de su uso y dura hasta cuatro días. "Esta receta la tenían a su disposición los Ejércitos de EE.UU., Reino Unido y otros países de la OTAN. En la URSS y en Rusia, el desarrollo y el almacenaje de sustancias químicas de este tipo no se realizaba", ha subrayado Lavrov.
"Además, en las muestras también se ha descubierto la presencia del agente nervioso A-234 en su estado original y en una concentración significativa, así como de los productos de su descomposición", ha agregado Lavrov. "Según la valoración de los especialistas, la concentración significativa de A-234 que se ha detectado habría provocado una muerte inmediata", ha destacado el ministro.
Además, ha hecho hincapié en que "teniendo en cuenta su alta volatilidad", el descubrimiento de la sustancia en su estado original y puro, por parte de los especialistas de la ciudad de Spiez, "parece extremadamente sospechoso", ya que "el período entre el envenenamiento y la toma de muestras fue bastante prolongado".
Por consiguiente, la rápida recuperación de los Skripal y del policía afectado se ajusta más al uso de la sustancia BZ, ha concluido Lavrov. Mientras tanto, en el informe de la OPAQ, publicado este jueves, no se menciona dicho agente nervioso. "Por lo tanto, nos dirigimos a la OPAQ para preguntarles por qué esta información fue omitida en el documento final", ha informado el ministro.
Respuesta del laboratorio suizo
Tras el anuncio que realizó el canciller ruso, el centro de investigación suizo escribió en Twitter que "solo la OPAQ puede comentar esta afirmación", aunque detalló que no tiene dudas sobre la veracidad de las conclusiones del laboratorio británico Porton Down debido a que esa instalación también es un laboratorio designado por la OPAQ, cuyos "estándares en la verificación son tan rígidos que uno puede confiar en los resultados".
En un tuit anterior, Spiez aseguró que "no pueden comentar de manera independiente" la afirmación de Lavrov.