Pekín dice tener preparada una respuesta para cualquier "acción unilateral" de Washington
China sigue las declaraciones de Estados Unidos en el ámbito de comercio e inversión y ya ha preparado una respuesta para cualquier posible "acción proteccionista y unilateral" de Washington, ha afirmado en una rueda de prensa este jueves el representante oficial del Ministerio de Comercio chino, Gao Feng, citado por RIA Novosti.
Con estas palabras, Gao ha valorado la posible introducción por parte de Estados Unidos de nuevas restricciones a las inversiones chinas.
El funcionario ha recordado que las empresas chinas han invertido "durante muchos años" en negocios en el país norteamericano, lo que ha supuesto "una importante contribución al desarrollo económico de Estados Unidos" y a su creación de empleo.
Gao ha lamentado que debido a la incertidumbre actual en el ámbito de la inversión, muchas empresas chinas han reducido las inversiones en EE.UU. o incluso han abandonado sus planes de instalarse en el mercado estadounidense.
¿Una guerra comercial?
La Oficina del Representante de Comercio de EE.UU. publicó a principios de abril una lista de aproximadamente 1.300 productos de China a los que impondrá aranceles en respuesta a lo que Washington considera "prácticas comerciales injustas". El volumen de la producción china afectada se estima en unos 50.000 millones de dólares.
Menos de 24 horas después de aquel anuncio, y en respuesta a las medidas tomadas por Washington, Pekín anunció la imposición de aranceles del 25 % a 106 productos estadounidenses, como la soja, automóviles y productos químicos.
En respuesta, Trump ordenó a los funcionarios de su Administración que consideren "si sería apropiado establecer aranceles adicionales" por un valor de 100.000 millones "a la luz de la injusta represalia por parte de China", según rezaba un comunicado difundido por la Casa Blanca.
Por su parte, el Ministerio de Comercio chino anunció que sus funcionarios de aduanas cobrarán a los importadores un arancel de alrededor del 179 % sobre el sorgo estadounidense, luego de que una investigación concluyera que estos envíos fueron injustamente subsidiados y perjudicaron a los productores de China.