Apenas transcurrida una semana desde que se perdiera el contacto con el explorador marciano Opportunity por causa de una intensa tormenta de polvo, el 'rover' Curiosity, de la NASA —ubicado en ese momento del lado opuesto de Marte—, registró con sus cámaras un drástico incremento en la intensidad de ese fenómeno meteorológico que ya ha envuelto al planeta rojo por completo, informa la agencia espacial estadounidense.
A diferencia del primero de esos vehículos robóticos de la NASA, que depende de la energía solar y cuyas baterías quedaron agotadas como consecuencia de la penumbra generada por el polvo, el Curiosity funciona a base de energía nuclear.
Esta ventaja le ha permitido mantenerse activo durante las severas condiciones climáticas que está experimentando Marte y tomar sucesivas fotografías de un mismo lugar —incluída una 'selfi'—, que sirven para apreciar la magnitud de los cambios registrados en la superficie del planeta en las últimas semanas.
La actual tormenta de polvo es la más fuerte de la que se tengan registros en la historia de la exploración marciana, y ya ha sido catalogada como un evento de polvo global, detalla la NASA.