Este viernes, en una entrevista concedida a la cadena CNBC, el presidente de EE.UU., Donald Trump, ha indicado que está dispuesto a imponer aranceles a todos los bienes de origen chino importados por EE.UU. si es necesario.
"Estoy listo para ir hacia 500", declaró Trump en referencia a la suma de las exportaciones chinas que EE.UU. recibió en el año 2017: 505.500 millones de dólares.
"No hago esto por política, lo hago para hacer lo correcto por nuestro país", comentó el presidente estadounidense. "Hemos sido estafados por China durante mucho tiempo", continuó.
Hasta ahora, en el contexto de la creciente guerra comercial, Washington ya ha gravado con aranceles 34.000 millones de productos chinos que han llegado a suelo estadounidense.
En junio, después de que la Casa Blanca anunciara la imposición de aranceles del 25% a los productos tecnológicos procedentes del gigante asiático, desde el Ministerio de Comercio de China declararon que Pekín impondría gravámenes contra bienes procedentes de EE.UU. similares a los impuestos por Washington.
Este lunes, China presentó ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) una nueva denuncia formal contra Washington en relación con su anuncio de imponer aranceles adicionales a las importaciones chinas por valor de 200.000 millones de dólares, con un alcance muy superior a los gravámenes que ya han entrado en vigor por 34.000 millones.
Mercados
La Bolsa estadounidense ha caído después de que Trump anunciara que está listo para aplicar aranceles: la mayor caída la ha sufrido el Dow Jones, que abrió la jornada perdiendo 137 puntos.
El anunció de Trump también ha influido en el mercado europeo, donde Europe StOXX 600 ha perdido poco más de 2 puntos.