Arabia Saudita, en problemas tras aumentar la producción de petróleo para complacer a Trump
Arabia Saudita se apresuró a impulsar la producción de petróleo bajo la presión del presidente de EE.UU., Donald Trump, con el fin de compensar el déficit de crudo proveniente de Irán, Venezuela y Libia, pero al poco tiempo Riad descubrió que los mercados globales podrían no necesitar todavía este aumento, informa el periódico The Independent, citando algunos expertos financieros.
La producción de crudo del reino experimentó el mayor aumento de los últimos tres años el mes pasado, a raíz de la colaboración que el presidente estadounidense le exigió a su aliado para enfriar los precios de la gasolina y llenar la brecha de oferta que crearán las sanciones norteamericanas a Irán.
Sin embargo, los saudíes están pasando apuros para vender todo el petróleo extra que esperaban vender y les preocupa haber abierto los grifos demasiado rápido, de acuerdo con las personas informadas por Riad en los últimos días.
"Arabia Saudita y varios otros miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) han aumentado las exportaciones bruscamente antes de las sanciones contra Irán, y el desajuste temporal entre estos efectos está presionando los precios del petróleo", ha comentado Martijn Rats, estratega global de petróleo de Morgan Stanley.
A finales del mes pasado, Arabia Saudita, junto con varios otros países de la OPEP y Rusia, acordaron aumentar su producción diaria a un millón de barriles en medio de las interrupciones de la producción en Venezuela y Libia y la esperada caída de las exportaciones petroleras iraníes.
Desde entonces, y luego de tocar un máximo de tres años de 80 dólares en mayo, los precios del petróleo retrocedieron a alrededor de 73 dólares por barril después de que Libia restaurara parte de su producción paralizada y de que la escalada de la guerra comercial entre EE.UU. y China suscitara temores sobre la fortaleza de la demanda.
"[Los sauditas] están produciendo una gran cantidad de crudo en este momento, y están preocupados por la presión a la baja sobre los precios", ha señalado Mike Wittner, jefe de investigación de mercado petrolero de Société Générale SA en Nueva York. "Están tratando de enhebrar una aguja en este momento, y el ancho de esa aguja es de 70 a 80 dólares", enfatizó.
Sin embargo, se cree que el impacto altamente incierto de las sanciones de EE.UU. sobre las exportaciones de petróleo de Irán desempeña un papel importante en la determinación del volumen y el precio final de la producción de petróleo.
El momento equivocado
Según la Agencia Internacional de Energía, los envíos de petróleo iraní a Europa se desplomaron alrededor del 50% en junio. Sin embargo, los expertos de la industria petrolera creen que una brecha de suministro más importante no llegará hasta que las sanciones entren en vigor en noviembre.
Antes de que eso suceda, es probable que Arabia Saudita tenga problemas para encontrar compradores para el crudo extra que ha bombeado respondiendo a la solicitud de Washington.
El problema también se está agravando por la caída de la demanda de crudo en Asia, señalan los expertos. Así, las cifras de seguimiento de buques cisterna de Bloomberg muestran que desde el 1 de julio las exportaciones de petróleo de Arabia Saudita se han desplomado en alrededor de 500.000 barriles por día hasta 6,7 millones en comparación con el mismo período en junio.
En un comunicado emitido el jueves, el Ministerio de Energía saudita dijo que las exportaciones de crudo para todo julio estarán en línea con las cifras del mes pasado y se espera que disminuyan en 100.000 barriles por día en agosto.