Por qué el tanque ruso T-80 "no está para bromas"
Según señala un artículo analítico titulado 'T-80: esto no está para bromas', publicado en la revista estadounidense The National Interest, a pesar de que algunos expertos creían que este veterano tanque soviético de la Guerra Fría se había vuelto obsoleto tras el desarrollo de las nuevas plataformas blindadas rusas, muchos creen lo contrario.
Su actualización y nueva puesta en servicio para las tropas acorazadas rusas y las características únicas de su motor apuntan a que es demasiado temprano para desechar a este carro de combate pese a la aparición de la plataforma Armada, señala el analista Charlie Gao.
La mayor ventaja que ofrece el T-80 con respecto a otros tanques rusos como los T-72 o T-90 y a los carros de combate extranjeros es su motor, mucho mejor adaptado para el frío clima de varias regiones de Rusia.
Los motores diésel con que están equipados casi todo los tanques del mundo necesitan ser calentados durante aproximadamente 45 minutos para ser puestos en marcha a temperaturas inferiores a -30 grados, mientras que los T-80, propulsados por turbinas de gas, ya pueden moverse al minuto de arrancarse su motor.
Los nuevos T-80BVM
A día de hoy, el T-80 se considera el tanque más móvil al servicio de las tropas blindadas rusas, aunque también adolece de problemas de autonomía, dado que su turbina consume grandes cantidades de combustible.
Sin embargo, fue precisamente su motor de turbina de gas lo que llevó a la decisión del Ministerio de Defensa ruso de dotar con la versión T-80BVM a las tropas acantonadas en el Ártico.
El rearme de estas nuevas unidades del Ejército ruso, creadas específicamente para actuar en condiciones de frío extremo, debe completarse antes de fin de año.
Según los expertos, esta renovada versión del veterano tanque de la Guerra Fría es ideal para las condiciones del extremo norte de Rusia.
Además de un actualizado generador y motor de arranque, este blindado incorpora el novedoso sistema de control de fuego Sosna-U, que dispone de una moderna cámara termográfica, telémetro láser y un sistema automático de seguimiento de objetivos.
Los T-80BVM cuentan también con sistemas de misiles Reflex, que se disparan desde el propio cañón del tanque. Se trata de proyectiles supersónicos que son apuntados por un lanzador desde el cañón del vehículo y guiados hacia su objetivo con láser.