Turquía ha advertido este viernes a EE.UU. que las sanciones y la presión contra Ankara solo servirán para dañar los lazos entre los dos aliados, y advirtió que seguirá tomando represalias contra los aranceles estadounidenses.
La decisión del presidente de EE.UU., Donald Trump, de imponer aranceles adicionales sobre las exportaciones de acero y aluminio de Turquía "hacen caso omiso" a las reglas de la Organización Mundial del Comercio y "no pueden asociarse con la seriedad que se espera de un Estado", se lamentó en un comunicado el portavoz del Ministerio turco de Relaciones Exteriores, Hami Aksoy.
Washington "debe saber que no puede obtener ningún resultado mediante ese tipo de sanciones y presiones, y que esto solo dañará nuestra alianza, forjada en los desafíos más difíciles", aseveró el vocero.
Aksoy adelantó que "todos los pasos" que se tomen contra su país "recibirán una respuesta", si bien matizó que Ankara siempre apostará por "la diplomacia, el diálogo, la buena voluntad y la comprensión mutua" para encontrar soluciones a los problemas existentes.
- Las declaraciones del diplomático llegan después de que Trump autorizara duplicar los aranceles al acero y al aluminio de Turquía. A través de su cuenta de Twitter, el mandatario explicó que tomó esta medida mientras "la lira turca se desliza rápidamente hacia abajo contra nuestro muy fuerte dólar", al tiempo que constataba que las relaciones con Turquía "no son buenas en este momento".
- El desplome de la moneda turca comenzó la semana pasada, después de que EE.UU. sancionara a dos ministros del Gobierno de Ankara que desempeñaron un papel clave en la detención del pastor estadounidense Andrew Brunson, por su presunto apoyo al fallido golpe de Estado en Turquía en julio de 2016.