Washington bloquea activos de Rusia en EE.UU. por valor de "cientos de millones de dólares"

El Departamento del Tesoro advierte que EE.UU. podría causarle a Rusia todavía más "dolor económico", si Moscú no cambia su política "de forma significativa".

Las autoridades estadounidenses han congelado activos de Rusia en EE.UU. por valor de cientos de millones de dólares, en el marco de las sanciones adoptadas contra Moscú. Así se desprende del texto de la intervención que la subsecretaria del Departamento del Tesoro de EE.UU., Sigal Mandelker, tiene previsto hacer este martes el Comité Bancario del Senado estadounidense.

"Las acciones del Departamento del Tesoro tuvieron amplias consecuencias para los intereses financieros de las personas físicas y jurídicas afectadas, incluida la congelación de activos rusos por valor de cientos de millones de dólares en EE.UU.", reza el texto.

Por otra parte, la subsecretaria ha advertido que EE.UU. podría causarle a Rusia todavía más "dolor económico", si Moscú no cambia su política "de forma significativa".

Mandelker, que ha descrito el programa de sanciones contra Rusia como uno de los "más activos y de mayor impacto", recuerda que, desde enero de 2017, Washington ha sancionado a 217 individuos y entidades relacionadas con Rusia "por una amplia gama de actividades".

Como "conducta maliciosa" de Rusia, la subsecretaria nombró la "ocupación" de Crimea, la "agresión continua contra Ucrania" y los intentos de "subvertir las democracias occidentales" a través de la supuesta injerencia en las elecciones. Asimismo, ha acusado a Rusia de "permitir a [Bashar al] Assad cometer masacres en Siria" y de "usar armas químicas en un intento de asesinar" al exagente Serguéi Skripal y a su hija Yulia.

Por su parte, Moscú ya anunció este mes que "el diálogo con Rusia desde una posición de la fuerza y desde ultimátums es inútil y carece de perspectivas", según los expresó la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova. En opinión del Kremlin, las restricciones de este tipo son "absolutamente ilegales y no conformes con el derecho internacional".