Alemania no debe quedarse de brazos cruzados ante las sanciones estadounidenses, opina el ministro alemán de Exteriores, Heiko Maas, que aboga por proteger los intereses de la UE en medio de la disputa entre ambas naciones.
"No debemos quedarnos sentados mirando a las sanciones económicas y a los aranceles [estadounidenses] como un conejo a una serpiente. Tenemos que proteger nuestros intereses", aseveró este domingo el jefe de la diplomacia alemana al periódico Bild.
En este sentido, Maas precisó que no se trata solo de los intereses de 80 millones de alemanes, sino de medio millón de europeos.
Alemania ha sido objeto de crítica por parte del actual Gobierno estadounidense. Ya durante su campaña presidencial, Donald Trump criticó a la canciller alemana Angela Merkel por su política migratoria de puertas abiertas, que describió de "catastrófica".
Trump también atacó a Berlín por el nivel de gasto militar que calificó de "injusto". "Alemania paga el 1% del PIB para la OTAN, mientras nosotros pagamos el 4% de PIB un mucho mayor. ¿Todos creen que esto tiene sentido?", tuiteó el presidente de EE.UU. el pasado mes de junio.
Igual que otros miembros de la UE, Alemania quedó golpeada por el aumento de tarifas de importación de acero y aluminio en el pasado mes de junio.
En relación a la conducta provocadora de Trump, Maas señaló que el estallido verbal contra su país pone en peligro la seguridad en Occidente "construida durante muchos años".
En agosto, Maas hizo una declaración aún más fuerte afirmando que Alemania debe "recalibrar la asociación transatlántica" con Washington.
Otra piedra en el zapato de las relaciones entre ambos países es el proyecto Nord Stream 2, de suministro de gas ruso a Alemania por el mar Báltico. Trump se opone al proyecto tachando a Berlín de "preso" de la energía rusa, promoviendo el gas licuado estadounidense en su lugar.