Ningún tipo de ataque contra el último bastión de los terroristas en Siria será ignorado por EE.UU. y sus aliados. Así lo afirmó la embajadora estadounidense en Naciones Unidas, Nikki Haley, al alertar contra cualquier tipo de ofensiva que prentenda retomar el control de la provincia de Idlib.
"No sólo abordaríamos, los EE.UU. y nuestros aliados, todo ataque con armas químicas, sino también cualquier ofensiva contra la población civil de Idlib", aseveró Haley en entrevista con Fox News, que cita las últimas discusiones al respecto en el Consejo de Seguridad de la ONU.
Haley enfatizó que Washington ya ha atacado posiciones de Damasco dos veces, basándose en la supuesta utilización de armas químicas por parte del Gobierno de Bashar al Assad, y dejó en claro que esta dispuesto a hacerlo de nuevo. "No nos pongan a prueba otra vez", aseveró la diplomática en advertencia a Siria y sus aliados, Rusia e Irán.
EE.UU. y sus aliados lanzaron bombardeos sobre el territorio sirio en abril, basándose en reportes nunca confirmados de un ataque químico en Duma, una zona posteriormente examinada por la Organización para la Prohibición de Armas Químicas donde no se detectó ningún agente nervioso.
Varios medios rusos –entre ellos RT– desmintieron ese supuesto ataque como una 'puesta en escena' por parte de los Cascos Blancos. Ahora, el Centro ruso para la reconciliación de las partes beligerantes en Siria afirma que se ha puesto en marcha una nueva grabación con niños secuestrados para escenificar un supuesto uso de armas químicas en Idlib.