'Ahora mandamos nosotras': El video viral de un festival erótico que conciencia del porno machista

'Sin educación sexual' es el título del video promocional del Salón Erótico de Barcelona (SEB) que esta semana se ha hecho viral en las redes sociales. Su contenido ha llamado la atención por buscar una reflexión sobre la manera en que los hombres 'aprenden' sobre el sexo a través del porno más machista. Además, incluye una crítica hacia la Justicia española y su actuación en algún caso concreto.

La voz femenina que guía a través de las imágenes es la de Silvia Rubí, actriz y productora porno que este año es la directora artística del festival. Bajo su dirección, la presente edición va a llevar a cabo numerosos cambios.

El video arranca con una pregunta muy directa: "¿Y tú? ¿Cómo aprendiste a follar?", mientras se ve a un profesor delante de una pizarra con diferentes posturas sexuales dibujadas. Las imágenes avanzan para dar paso a imágenes de porno, a lo que la actriz añade: "Exacto. De ellos has aprendido cómo, cuándo y por dónde meterla."

La producción resalta que todavía el porno más machista sigue siendo el libro de instrucciones de la mayoría de varones, que además transmite una serie de valores y de estereotipos sobre la vestimenta de las mujeres, su papel en el sexo o el consentimiento, entre otros asuntos.

"El porno más machista seguirá siendo la única clase de educación sexual a la que asistirá tu hijo y tu hija", se asevera en el video, y añade: "Y mientras siga así seguiremos fabricando violadores en manada, seguiremos acumulando minutos de silencio y seguiremos estando en manos de jueces que crean que una violación es un jolgorio sexual", en referencia a la conmoción popular que supuso todo lo relacionado con el caso de La Manada.

El video acaba con la afirmación de que "con una sociedad sin educación sexual, era inevitable que el porno cambiara", mientras aparece el lema 'Ahora mandamos nosotras'.

Cambios es el festival

Y sí, en este festival ahora mandan ellas. Todas las directoras creativas de esta edición son mujeres. No es la primera vez que tienen a una fémina en la dirección, pero sí la primera en que todas son mujeres. Silvia Rubí, la protagonista del video promocional, que además es la directora artística del Salón, nos cuenta el por qué de este nuevo rumbo.

Además de que el cambio partió de la propia dirección del evento, explica Rubí, "estaba claro que estaba todo un poco desfasado y necesitaba un giro". Era el momento adecuado, con las reivindicaciones feministas, la presión social, el debate público generado en torno a diferentes problemáticas, como demostró el juicio a La Manada por los abusos sexuales grupales a una joven de 18 años.

Y aunque opina que sí hay hombres feministas, y qué también los hay dentro del porno, "empezando por el SEB, que está dirigido por hombres, no son la mayoría", afirma Rubí. Así, aunque cree que no hacía falta que las mujeres dirigieran todas las áreas creativas del Salón, "nos viene muy bien, genera otro impacto".

La reivindicación: educación sexual

En esta edición se reivindica la educación sexual. Para Silvia Rubí, se sigue aprendiendo sobre sexo en el porno, "no hay educación en el colegio, ni en las familias", y señala que para los jóvenes no hay ninguna figura de referencia a la que poder consultar. Así, la mayoría de los chavales "tiran de porno y de hacernos preguntas a nosotros. Yo recibo preguntas de chavales todos los días", cuenta. 

En este sentido, afirma que hay muchas cosas por hacer, "incluso desde el Gobierno". Como una guía útil que aunque no se reparta, se pueda consultar, que esté a disposición de la ciudadanía y que al ser editada por un organismo público no genere preocupación acerca de su fiabilidad.

Rubí lo tiene claro, la educación sexual debe ser "más extensa y dinámica, y más inclusiva". Apuesta por una comunicación parental más activa, que actualmente es casi inexistente: "Al final tienes que tirar de tus amigos, que saben todavía menos que tú, y acaban viendo los videos que ven".

El festival que viene

Sobre los cambios, en primer lugar, la directora artística cuenta que ha querido poner ciertas normas para que el público se dé cuenta del cambio que el evento pretende. Algunas de ellas son la prohibición de ciertas vestimentas, "como ir vestida de colegiala" u otros atuendos como el de "pornochacha", que además de resultar ya "casposos" dibujan a la mujer como un objeto. En este sentido, las indicaciones dadas a los artistas participantes han sido en la dirección de "buscar géneros más neutros u otros relacionados con la fantasía", relata Rubí.

Precisamente, muchas de las novedades del Salón giran en torno a este cariz igualitario en cuanto al género. Se pretende que el espectador sea consciente de este cambio "por toda la paliza que estamos dando", dice la directora artística coloquialmente, que añade que "el aire que se respira va a ser diferente". Se quiere que el visitante entienda que el 'show' es consensuado y que el respeto es esencial.

El respeto como seña de identidad

En esta ocasión los escenarios estarán dirigidos a las gradas del público y además se contará con pantallas para poder observar lo que ocurre en ellos. Junto con la prohibición de los palos de selfies, se busca de esta manera que todas las personas puedan disfrutar de los espectáculos desde cualquier lugar, sin necesidad de las aglomeraciones que ocurrían en pasadas ediciones.

También se ha prohibido a los artistas estar desnudos mientras no se está actuando, para evitar la avalancha del público e incentivar así el respeto hacia los artistas; "que vean a unos artistas que se están comunicando a través de sexo en vivo", según Rubí.

Mucho más que sexo en vivo

Pero el festival es mucho más que los espectáculos sobre los escenarios del Salón, también hay una zona dedicada al arte donde se podrán apreciar tanto esculturas como pinturas, así como un concurso de 'body paint'.

Aunque el punto fuerte de esta sección son los talleres de sexo, donde se podrá aprender sobre el tantra, la diversidad sexual, la masturbación femenina o la importancia del suelo pélvico, así como participar en un TupperSex o charlar sobre bisexualidad.

El espacio también presta atención a la sexualidad de las personas con diversidad funcional y a las enfermedades de transmisión sexual y su prevención.

Contra el abuso infantil

Además, la campaña 'STOP abusos sexuales infantiles', iniciada el año pasado, también estará presente en esta ocasión. "Es importante dejar claro a sus visitantes y a la sociedad en general que hay líneas rojas que no se pueden traspasar", dicen en su web. Así, el SEB se involucra con la Fundación Vicki Bernadet, referente en esta lucha.

En este sentido, son muchos los compromisos adquiridos por el Salón, como suprimir los materiales que infantilicen a los personajes o actores, ofrecer una conferencia sobre el tema o convocar un acto reivindicativo la última jornada del festival.

También ha llegado la crítica: cinismo e hipocresía

Aunque el video promocional del SEB 2018 se ha hecho viral y muchos han sido los que han alabado su contenido, también han sido otros muchos a los que la campaña no les ha convencido. En su mayoría lo tachan de cinismo al venir de un festival erótico:

Nuria López