Aseguran que Trump planea reemplazar a la secretaria de Seguridad Nacional y al jefe de Gabinete
El presidente estadounidense, Donald Trump, está considerando un nuevo reajuste en su administración y preparándose para reemplazar a la titular del Departamento de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, y al jefe de Gabinete de la Casa Blanca, John Kelly, según varias fuentes familiarizadas con el asunto.
Se estima que Nielsen, quien reemplazó a John Kelly en el Departamento el año pasado, abandonará su cargo en las próximas semanas. Sin embargo, está luchando por retrasar su propia partida, según fuentes citadas por ABC News.
Se desconoce el plazo para una reorganización, y la Casa Blanca no ha respondido a una solicitud de comentarios.
Mientras tanto, el futuro político de Kelly, ya en duda desde hace algún tiempo, es incierto. Fuentes de ABC News aseguran que en las últimas semanas el presidente ha vuelto a discutir el tema con muchos de sus principales asesores y que ha seguido creciendo la distancia entre ambos.
Las fuentes consideran al actual jefe de gabinete del vicepresidente, Nick Ayers, como el candidato principal para reemplazar a Kelly.
A Ayers, de 36 años, se le ha visto cerca del presidente desde la pasada semana. Múltiples fuentes dicen que sostuvieron una larga conversación en la Casa Blanca durante la noche de las elecciones de medio término, mientras observaban los resultados.
El papel de Ayers como mano derecha del vicepresidente Mike Pence a lo largo del año lo ha puesto en estrecha proximidad durante algunos de los momentos claves de la presidencia de Trump. Varias fuentes indicaron a ABC News que también se ha hecho íntimo de la familia del presidente, particularmente de Ivanka Trump y su marido, Jared Kushner, en los últimos meses.
En cuanto a Nielsen, Trump había querido despedirla con anterioridad, pero Kelly solía intervenir y amenazó con dimitir, según las fuentes mencionadas.
El presidente ha estado diciendo en privado, durante meses, que no cree que Nielsen esté haciendo lo suficiente para imponer una política de inmigración más estricta.