Durante una conversación telefónica mantenida este lunes con la canciller alemana, Angela Merkel, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha subrayado que "las autoridades ucranianas son las únicas responsables de crear la nueva situación de conflicto y los riesgos conexos" en el estrecho de Kerch, según reza un comunicado de prensa publicado por Kremlin.
El mandatario ruso expresó a Merkel su profunda preocupación por la decisión de Kiev de introducir la ley marcial en el país y de mantener el estado de alerta militar, subrayando su deseo de que "Berlín influya en las autoridades ucranianas para evitar que den más pasos imprudentes", según dijo durante la charla telefónica, mantenida a iniciativa de la parte alemana.
Desde el Kremlin apuntan a una provocación orquestada con la vista puesta en las próximas elecciones presidenciales ucranianas, previstas para la primavera de 2019.
La decisión de declarar la ley marcial en el territorio nacional se produce a raíz del incidente protagonizado por tres barcos de la Armada ucraniana que entraron ilegalmente en las aguas territoriales de Rusia y fueron apresados. Sobre la base de esta iniciativa, el Estado Mayor de Ucrania ya toma medidas para organizar una movilización militar parcial.
Tres barcos ucranianos entran ilegalmente en aguas rusas
El pasado 25 de noviembre tres barcos de las Fuerzas Navales de Ucrania cruzaron ilegalmente la frontera estatal rusa en dirección al estrecho de Kerch, que separa a la península de Crimea de Rusia continental, violando los Artículos 19 y 21 de la Convención de la ONU sobre el Derecho del Mar.
Ante las maniobras "peligrosas" de los buques ucranianos, Rusia cerró temporalmente el paso por el estrecho con un buque de carga seca. Según el Servicio de Seguridad de Rusia (FSB), los buques ignoraron la llamada a detenerse de inmediato. Un buque de la Guardia Fronteriza rusa embistió al remolcador ucraniano Yany Kapu y los guardias fronterizos abrieron fuego, hiriendo a tres ucranianos que posteriormente recibieron asistencia médica. Finalmente, los tres buques fueron apresados.
Postura de Rusia y Ucrania
Tras la confrontación, Kiev acusó a Rusia de agresión y afirmó que los buques se dirigían desde la ciudad ucraniana de Odesa al puerto de Mariúpol, en el mar de Azov, cumpliendo con las normas internacionales de navegación.
En respuesta a las declaraciones de Kiev, la portavoz de la Cancillería de Rusia, María Zajárova, tachó las acciones de Ucrania en el estrecho de Kerch de métodos criminales y provocación.
Después de "desgarrar a Ucrania" y establecer 'la paz' en Donbass, el presidente ucraniano, Piotr Poroshenko, ha puesto la mirada en el estrecho de Kerch, escribió la vocera en su cuenta de Facebook. "Son bandidos de carretera. Y sus métodos son de bandidos: al principio la provocación, luego la presión de fuerza y luego la acusación de agresión", ha concluido Zajárova.
Asimismo, Moscú "no duda que la provocación" de la Armada de Ucrania en el estrecho de Kerch fue organizada con "la aprobación" o, posiblemente, hasta con "una orden directa" de los líderes de ese país, según ha declarado el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, en rueda de prensa.