Rusia está dando cuerpo a la construcción de un flamante puerto marítimo en el océano Ártico en el marco de su proyecto global de la Ruta Marítima del Norte. Se estima que el volumen total de las inversiones en la nueva infraestructura alcanzará unos 4.000 millones de dólares.
El nuevo puerto, que se ubicará en el pequeño asentamiento de Indiga, en la región Nenets, operará durante todo el año, informa Interfax.
El volumen anual de negocio a nivel nacional en concepto de transporte de cargas alcanzará los 70 millones de toneladas, 50 millones de los cuales recaerá en carbón, extraído de la Cuenca de Kuznetsk, el mayor yacimiento de carbón de Rusia, el suroeste de Siberia.
El puerto marítimo será financiado tanto por el Estado como por inversionistas privados. Requerirá la creación de la infraestructura terrestre necesaria, de ahí que esté previsto que el proyecto incluya la construcción de un nuevo ferrocarril que conecte Indiga con la ciudad de Surgut, en Siberia Occidental.
La idea de construir un puerto marítimo en el asentamiento de Indiga no es nueva. Según un plan anterior, el puerto estaba destinado a las exportaciones de gas natural licuado, pero el gigante de la energía estatal rusa Rosneft no logró obtener el permiso correspondiente y el proyecto quedó congelado.
Indiga, poblada por solo 632 personas desde el año 2010, está ubicada en la desembocadura del río que homónimo. El caudal casi nunca está congelado y es lo suficientemente profundo como para acomodar la infraestructura del puerto.