El Tratado sobre Misiles de Alcance Medio y Corto (INF, por sus siglas en inglés), firmado hace 30 años por la URSS y EE.UU., ha sido uno de los cimientos del moderno régimen de supervisión y control sobre la no proliferación de armas nucleares. Sin embargo, ya en diciembre del 2017, el presidente ruso Vladímir Putin señaló que Estados Unidos ya había "abandonado el tratado de facto", indica un artículo de TASS sobre el tema.
Primero que todo, ¿qué son misiles de alcance corto y mediano? Hace 30 años la URSS y EE.UU. acordaron que se trataba de aquellos cuyo alcance varía entre 500 y 5.500 kilómetros.
Rusia: El sistema Aegis con base en tierra y drones de ataque
30 años después de la confección del tratado, ambos Estados firmantes se acusan mutuamente de violar el INF. En Rusia, por ejemplo, creen que los sistemas antimisiles en las instalaciones en tierra del sistema de defensa antimisiles Aegis estadounidense pueden ser fácilmente reemplazados por misiles de crucero de alcance medio, lo que sería una violación directa del tratado.
"Ellos [EE.UU.] instalaron sus sistemas, supuestamente antimisiles, en Rumania. ¿Y cómo lo hicieron? Instalaron los lanzadores de Aegis, simplemente los sacaron del mar y los instalaron en tierra. Pero los antimisiles pueden reemplazados fácilmente [en los lanzadores] con misiles de mediano alcance", dijo Putin en una gran conferencia de prensa ofrecida 14 de diciembre de 2017.
El Departamento de Estado de Estados Unidos, a su vez, refuta la posibilidad de lanzar misiles de crucero con el sistema Aegis Ashore.
A partir de octubre del 2018, el sistema Aegis Ashore está en servicio en la ciudad de Deveselu, Rumania. Además los planes de EE.UU. de instalar estos sistemas en la base polaca de Redzikowo el año en curso siguen en vigor.
Además, a Rusia le preocupa la presencia drones de combate de Estados Unidos, cuyo rango de operación es de 1.100 kilómetros. La aerodinámica, carga útil y características de estos vehículos lo hacen muy similares a los misiles de crucero.
EE.UU.: El misil ruso 9M729 para el sistema Iskander
Estados Unidos afirma que Rusia está desarrollando un misil de crucero con base en tierra, el Novator 9M729, supuestamente destinado para el sistema de lanzamiento táctico-operacional Iskander-M y que su alcance es de al menos 3.000 km.
Por su parte, los funcionarios rusos nunca han confirmado la existencia ni las pruebas de este proyectil.
Mientras tanto, según lo declarado en octubre del 2017 por el presidente del Comité de Defensa y Seguridad de la Cámara alta del Parlamento ruso, excomandante de la Fuerza Aérea, Viktor Bóndarev, los nuevos misiles que usa el Iskander-M no violan el tratado INF.
"Quiero enfatizar que los nuevos misiles para OTRK [siglas rusas para el 'Sistema de Misiles Táctico-Operacional'], probados el día anterior, no violan el Tratado sobre Misiles de Alcance Medio y Corto, vigente desde 1988, porque su alcance no supera los 500 kilómetros. Lo hicimos público en la región de Astracán, en Kapustin Yar, lanzando este modelo a su alcance máximo de 480 kilómetros", dijo.
Interviene el factor 'terceros'
Mientras tanto, el 20 de octubre pasado, el presidente de EE.UU., Donald Trump, anunció su intención de retirarse del tratado INF, alcanzado en 1987 entre EE.UU. y la entonces URSS.
Por su parte, Putin ha anunciado este miércoles que si, después de retirarse del tratado INF, EE.UU. se arma con misiles de alcance medio y corto, Rusia hará lo mismo. Además, el mandatario ruso ha advertido que algunos países ya están produciendo este tipo de armas.
"Muchos otros países —es probable que aproximadamente una decena— producen este tipo de armas, mientras que Rusia y Estados Unidos se han limitado bilateralmente. Ahora, al parecer, nuestros socios estadounidenses creen que la situación ha cambiado tanto que EE.UU. también debe tener estas armas ¿Cuál será nuestra respuesta? Muy simple: lo haremos entonces también", ha explicado el líder ruso.
Como de costumbre, ninguna evidencia
Además el presidente ruso volvió a señalar que la parte estadounidense no ha proporcionado ninguna evidencia de que Rusia supuestamente violara el tratado INF, al comentar la reciente declaración del secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, de que Washington se retiraría de dicho acuerdo dentro de 60 días "si Moscú no vuelve a cumplirlo".
Putin señaló que "la declaración del señor Pompeo fue algo tardía; al principio, la parte estadounidense anunció que tenía la intención de retirarse del tratado INF, y luego comenzó a buscar las razones por las cuales deberían hacerlo".
"La justificación más importante es que nosotros estamos violando algo. Al mismo tiempo, como de costumbre, no se proporciona ninguna evidencia de estas violaciones por nuestra parte", hizo hincapié el mandatario ruso.