Este sábado, Alexéi Volski, primer jefe adjunto del Departamento de la Guardia Costera del Servicio de Seguridad Federal de Rusia (FSB, por sus siglas en ruso) en el marco de una rueda de prensa conjunta con Mijaíl Shishov, jefe de la Dirección de Investigación del FSB, acerca de los eventos relacionados con la violación de la frontera estatal rusa por tres buques militares ucranianos y su posterior apresamiento en la zona del estrecho de Kerch el pasado 25 de noviembre, ha revelado que todas naves ucranianas estaban en disposición de combate horas antes de que la parte rusa se viera obligada a usar las armas para detenerlas.
La tripulación de los buques ucranianos se puso en disposición de combate a las 08:35 (hora Moscú): fueron desenfundadas las armas de artillería, sus cañones subidos a un ángulo de 45 grados y dirigidos a los barcos rusos, "para provocar a los marineros rusos a tomar acciones de respuesta". En esos momentos —como se ve en las imágenes difundidas anteriormente— las armas en los barcos de la Guardia Costera rusa "no estaban en alta disposición de combate", sostuvo Volski.
El barco de la Guardia Frontera rusa Izumrud realizó disparos de advertencia a las 20:45 (hora Moscú) después de horas de persecución de los barcos ucranianos y su falta de respuesta adecuada a las exigencias de la Guardia Costera rusa de poner fin a maniobras peligrosas en las aguas territoriales rusas y detenerse. Estos disparos fueron realizados de acuerdo con todas las normas para evitar un posible impacto con las naves a las que se avisa. Sin embargo, los buques ucranianos siguieron ignorando las exigencias de las fuerzas rusas.
"A las 20:50 el comandante del barco Izumrud avisó a la nave blindada Berdiansk de que en caso su desobediencia posterior se vería obligado a usar las armas para detenerla. El comandante de la nave ucraniana ignoró esta advertencia", ha indicado.
El disparo fue realizado a las 20:55, con el objetivo de detener a la nave ucraniana sin causar graves daños tanto al buque como a la tripulación. A pesar de las difíciles condiciones en mar abierto y la oscuridad, el capitán del Izumrud lo logró, indicó Volski. Con ello, los tres marineros ucranianos que resultaron heridos fueron impactados "levemente" con los trozos del casco de la nave, reveló Volski.
"No hubo heridas directas de bala", confirmó, por su parte Shishov.
Además, Volski señaló que durante la inspección posterior de los buques apresados de la Armada de Ucrania, las autoridades rusas encontraron armas y municiones que excedían en número las municiones estándares.
Delito penal
Ucrania está tratando de presentar a los 24 marineros detenidos después de este suceso como prisioneros de guerra, pero en Rusia ellos están acusados de cometer un delito penal [violar la frontera estatal], y "de conformidad con la Convención sobre el tratamiento de los prisioneros de guerra, firmada en Ginebra el 12 de agosto de 1949, ellos no pueden considerarse como prisioneros de guerra, ya que Rusia y Ucrania no están en un estado de conflicto militar o guerra", declaró Shishov.
Añadió que todos detenidos actualmente se encuentran en un centro penitenciario en Moscú y a los heridos se les está brindando la asistencia médica necesaria. Además, algunos de ellos han elegido ejercer su derecho a realizar una llamada telefónica.
Por otra parte, Shishov indicó que un residente de Donetsk ha acudido al FSB con la declaración de que uno de los marineros ucranianos detenidos es un efectivo del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU), a manos de quien anteriormente sufrió torturas con lesiones graves en la ciudad de Berdiansk.
No hay bloqueo marítimo de los puertos ucranianos
Volski también ha negado las acusaciones de que Rusia está bloqueando el paso a las naves ucranianas por el estrecho de Kerch. "Del 1 de abril al 1 de diciembre de 2018, 18.783 embarcaciones pasaron por el estrecho de Kerch". Antes del paso por el canal se inspeccionaron 2.052 embarcaciones, especificó Volski.
"De los barcos inspeccionados, 1.183 naves realizaban transporte de mercancías a los puertos rusos en el mar de Azov y solo 869 barcos se estaban dirigiendo a los puertos ucranianos", indicó. Estos datos hacen evidente el hecho de que las autoridades rusas inspeccionaron más naves que se dirigían a los puertos rusos "y no se trata de ningún supuesto bloqueo marítimo de los puertos ucranianos", enfatizó.
¿Qué pasó en el estrecho de Kerch?
El 25 de noviembre, alrededor de las 07:00 (hora de Moscú), los buques de la Armada ucraniana Berdiansk, Nikopol y Yany Kapu, en violación de los Artículos 19 y 21 de la Convención de las ONU sobre el Derecho del Mar, cruzaron ilegalmente la frontera estatal rusa en dirección al estrecho de Kerch, que separa a la península de Crimea de la Rusia continental. Los buques realizaron maniobras peligrosas y no obedecían a los requisitos de los guardias fronterizos rusos, que causó la suspensión de la navegación de embarcaciones civiles a través del estrecho.
Ante la desobediencia de las naves ucranianas, un buque de la Guardia Fronteriza rusa embistió al remolcador ucraniano Yany Kapu y los guardias fronterizos abrieron fuego, hiriendo a tres militares ucranianos que posteriormente recibieron asistencia médica. Las naves ucranianas fueron apresadas y trasladadas al puerto ruso de Kerch. Fue incoada una causa penal en virtud de la parte 3 del artículo 322 del Código Penal de la Federación de Rusia (cruce ilegal de la frontera estatal).
En respuesta, Kiev acusó a Moscú de agresión y afirmó que la parte rusa había sido informada sobre el acercamiento de los buques que planeaban cruzar el estrecho de Kerch, pero no respondió. El Gobierno ucraniano insiste en que sus buques se dirigían desde la ciudad ucraniana de Odesa a Mariúpol sin violar las reglas internacionales de navegación. El 26 de noviembre, el Parlamento de Ucrania aprobó la introducción de la ley marcial en el país por un plazo de 30 días.