"Sé cómo cortar bien", cita Erdogan a un experto forense saudí involucrado en la muerte de Khashoggi

El presidente turco reveló más detalles de las grabaciones de audio del consulado de Arabia Saudita en Estambul durante el asesinato del periodista Jamal Khashoggi.

"En la grabación se escucha cómo el jefe de inteligencia [saudita] dice que es un desastre, porque ese hombre [Khashoggi] ha sido drogado. 'Sé cómo cortar bien', responde otro hombre. ¿Por qué? Porque es un experto forense, es un militar de alto rango", declaró este viernes el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, durante su discurso en un evento de la Plataforma de Jerusalén Interparlamentaria en Estambul.

"Todo está ahí, en las grabaciones", agregó Erdogan, citado por el diario local Hurriyet Daily News.

Días antes trascendió la información de que las últimas palabras del columnista de The Washington Post fueron "Me estoy asfixiando, quítenme esta bolsa de la cabeza, tengo claustrofobia".

Citando a los miembros de la inteligencia turca, los medios afirmaron que el jefe forense de la Dirección General de Seguridad Pública de Arabia Saudita, Salah al Tubaiqi, controló el proceso de desmembramiento de Khashoggi, y que para evitar las manchas de sangre en la instalación diplomática, los asesinos recubrieron la sala con bolsas de plástico.

Fuentes con acceso a la investigación relataron a la prensa que las grabaciones evidencian que Al Tubaiqi participó personalmente en el desmembramiento del periodista, en presencia del cónsul, y que instó a los demás a que escucharan música para no oír otros sonidos mientras cortaba el cadáver, que aún no ha sido encontrado.

El jefe del departamento de investigación del periódico turco Daily Sabah, Nazif Karaman, precisó en una entrevista concedida a Al Jazeera que el estrangulamiento duró siete minutos y el desmembramiento otros 15.

En los medios también aparecieron los nombres de dos personas cercanas al príncipe heredero saudí, Saúd al Qahtani y Maher Abdulaziz Mutreb, en relación con el asesinato. Mutreb, exdiplomático de Arabia Saudita que acompaña de manera habitual a Mohammed bin Salmán, habría hecho al menos tres llamadas telefónicas para informar que "la cosa está hecha". Al Qahtani, un importante exasesor del príncipe heredero, supuestamente habría ordenado el asesinato de Khashoggi.

Tras varias explicaciones contradictorias, Riad admitió que Khashoggi fue matado en el consulado, pero niega la implicación del Gobierno y de Bin Salmán. Las autoridades sauditas dicen que los agentes que asesinaron al periodista excedieron su autoridad y que ya han detenido a 21 personas relacionadas con el caso, cinco de las cuales podrían enfrentarse a la pena de muerte.