"Igualdad en torturas": Una periodista celebra que tres mujeres dirijan la CIA y la Red la castiga

Un tuit publicado el pasado sábado por la periodista estadounidense Rachel Maddow (de la cadena MSNBC) en el que muestra su satisfacción ante el hecho de que la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés) esté encabezada en la actualidad por tres mujeres, ha generado una ola de comentarios críticos en Twitter.

Gina Haspel, directora de la CIA, nombró la semana pasada a Cynthia 'Didi' Rapp como nueva subdirectora de análisis, lo que la convierte en la analista de más alto rango dentro de la organización. El mes pasado Elizabeth Kimber fue nombrada primera subdirectora de operaciones, sumando su nombre al de Dawn Meyerriecks, que desde hace años ejerce como subdirectora de ciencia y tecnología dentro de la agencia de Inteligencia del Gobierno de EE.UU. Así las cosas, las tres principales ramas de la CIA —operaciones, análisis y ciencia y tecnología— están dirigidas por mujeres.

Maddow compartió a través de esta red social un artículo de la NBC News titulado 'Hermandad de espías: las mujeres ahora ocupan los primeros puestos en la CIA', mostrando de este modo un aparente respaldo a la nueva 'troika' femenina de la agencia estadounidense.

Las críticas contra la periodista no se hicieron esperar, arguyendo numerosos internautas que, independientemente, de quién ocupe los cargos más altos de la CIA, esta organización sigue llevando a cabo acciones más que cuestionables en relación con los derechos humanos.

"¡Ahora las mujeres también pueden ser reconocidas como criminales de guerra! ¿Aplausos al feminismo?", reza uno de los mensajes. "Realmente, espero que las mujeres oprimidas en naciones musulmanas aprecien que el dron sobre sus cabezas fue enviado por mujeres empoderadas", se puede leer en otro mensaje publicado en Twitter. Asimismo, hay quien escribe que "luchar por el derecho de una mujer a ser tan sociopática y tóxica como cualquier hombre" no es un progreso, mientras que otros hacen hincapié en que no es necesaria "la igualdad de género en el sector de la tortura-asesinato-política-interferencia-vigilancia-estado", sino que lo que realmente hace falta son "cerebros, dedicación y verdad".

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