"Acabó la era de la vergüenza de EE.UU.": Pompeo reivindica "la fuerza liberadora" en Oriente Medio
"Estados Unidos es una fuerza para el bien en Oriente Medio", proclamó este jueves el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, en su discurso ante la Universidad Americana de El Cairo, donde no dudó en calificar tan benevolente definición de su país de "verdad de la que no hablan a menudo en esta parte del mundo".
"Una fuerza liberadora, no una potencia ocupante"
Sin entrar en detalle en cuestiones de geopolítica ni en los problemas generados en la región, Pompeo se centró en lo que considera "buenas noticias", como "la bondad innata" de EE.UU. y un "futuro brillante", entre otras cosas.
"Estados Unidos siempre ha sido y siempre será una fuerza liberadora, no una potencia ocupante. Nunca soñamos con la dominación en Oriente Medio. ¿Pueden decir lo mismo de Irán?", preguntó el secretario de Estado, que argumentó sus palabras con ejemplos: "En la Segunda Guerra Mundial los militares estadounidenses ayudaron a liberar el norte de África de la ocupación nazi. Cincuenta años después, formamos una coalición para liberar Kuwait de Sadam Husein. ¿Acudirían en su rescate los rusos o chinos de la misma manera que nosotros?".
Pompeo no dudó en recordar que "era otro estadounidense" el que "malinterpretó gravemente" la historia en ese mismo escenario hace diez años, refiriéndose al discurso que Barack Obama dio en El Cairo en 2009, aunque sin mencionar el nombre del expresidente. "Les dijo que EE.UU. y el mundo musulmán necesitaba —cito— 'un nuevo comienzo', fin de la cita", dijo el político en alusión a Obama, que en aquel discurso tendió la mano a Irán (con el que alcanzó en 2015 un acuerdo nuclear anulado ahora por la Adminsitración de Donald Trump) y criticó los asentamientos de Israel.
"¿Qué aprendimos de todo esto? Aprendimos que cuando EE.UU. se retira, a menudo viene el caos. Cuando desatendemos a nuestros amigos, se genera el resentimiento, y cuando colaboramos con los enemigos, ellos avanzan", declaró Pompeo.
En definitiva, el secretario de Estado estadounidense aseguró que "la era de la vergüenza americana autoinflingida ha terminado, al igual que las políticas que produjeron tanto sufrimiento innecesario". "Ahora viene el verdadero nuevo comienzo", recalcó.
"Robusta ayuda humanitaria" para Yemen y paz para Siria
"En Yemen hemos asistido a nuestros socios de la coalición mientras toman la iniciativa en prevenir la expansión iraní que sería desastrosa para el comercio mundial y la seguridad regional", prosiguió Pompeo, subrayando que, "como siempre ha sido el caso de EE.UU.", la involucración de Washington "también ha venido acompañada de una robusta ayuda humanitaria".
Según las estimaciones de la ONU e incluso de los aliados de EE.UU., Yemen sigue viviendo la peor crisis humanitaria del mundo, con millones de personas hambrientas y desplazadas.
El secretario de Estado también afirmó que en Siria e Irak la vida está volviendo a la normalidad gracias a los esfuerzos de la coalición estadounidense: "La vida está volviendo a la normalidad para millones de iraquíes y de sirios. Las naciones de la coalición global deberían estar enormemente orgullosas de este logro. Juntos hemos salvado miles de vidas".
Pompeo tampoco se olvidó de atribuir a Washington el logro de la victoria sobre el Estado Islámico. "La vida bajo el Estado Islámico era un verdadero infierno, un infierno vivo en la Tierra. Hoy aquellas zonas están liberadas gracias a la fuerza de nuestra coalición y el compromiso", sentenció Pompeo.
Según dijo, hora solo queda esperar a que se resuelvan los últimos problemas en la región para que "la fuerza del bien" deje a las naciones de Oriente Medio ser dueños del destino de sus países sin intervención desde el exterior. "Cuando la misión está terminada, cuando el trabajo está hecho, EE.UU. se va", prometió Pompeo.