México y Uruguay proponen plan de cuatro etapas para solucionar crisis política en Venezuela

Ambos países plantean un mecanismo que privilegie el diálogo desde una perspectiva "de respeto al derecho internacional".

Los Gobiernos de México y Uruguay plantearon este miércoles el Mecanismo de Montevideo, una propuesta de cuatro etapas que permita fomentar "condiciones necesarias" para encontrar una solución "integral y duradera" a la crisis política que atraviesa Venezuela, tras la autoproclamación del diputado Juan Guaidó como "presidente encargado", y su posterior reconocimiento por parte de EE.UU. y varios países en América Latina y Europa.

La iniciativa, que privilegia el diálogo desde una perspectiva "de respeto al derecho internacional y a los derechos humanos", quedó plasmada en un comunicado conjunto entre México y Uruguay, después de efectuarse una reunión este miércoles entre Marcelo Ebrard, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México (SRE); el presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez; y su canciller, Rodolfo Nin Novoa.

En el documento, se hace mención a cuatro fases: 

¿Quienes acompañarían el proceso?

En el comunicado, los países proponentes  manifestaron que en caso de que "las partes decidan comunicarse", serán invitados al proceso de diálogo Rebeca Grynspan, exvicepresidenta de Costa Rica y actual secretaria general Iberoamericana; así como los ex cancilleres de Uruguay y México, Enrique Iglesias y Bernardo Sepúlveda, respectivamente; y también David Simons, expresidente del Tribunal Supremo de Barbados.

"Se trata de personalidades de reconocida experiencia internacional y calidad moral para acompañar este mecanismo", añaden en el comunicado. 

La repuesta de Venezuela 

Ante la propuesta, el presidente Nicolás Maduro anunció este miércoles el "respaldo absoluto" de su Gobierno a las cuatros etapas del Mecanismo de Montevideo.

El mandatario ratificó que su Gobierno está "listo y preparado" para participar en un proceso de diálogo "para la búsqueda de la paz y el entendimiento".  

Aunque las propuestas de negociación se han puesto sobre la mesa, desde Washington el mensaje es rechazo a cualquier medida de acercamiento entre los factores en pugna. Hace cinco días, el vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, dijo que "este no es el momento para el diálogo" en Venezuela, sino que "el momento para la acción". 

La declaración de Pence se produjo justamente después que Guaidó rechazara la propuesta de "un nuevo mecanismo de diálogo" en la nación caribeña, anunciado por México y Uruguay.