La Justicia argentina detuvo este viernes a un abogado acusado de extorsionar a un productor agropecuario en nombre del fiscal Carlos Stornelli, quien investiga a empresarios y ex funcionarios kirchneristas en la causa denominada 'de los cuadernos'.
Se trata de Marcelo D´Alessio, quien le habría pedido 300.000 dólares al empresario Pedro Etchebest a cambio de que no lo involucre en el caso.
El propio Etchebest lo denunció aportando grabaciones, filmaciones, fotos y conversaciones por mensaje de texto como prueba de una presunta extorsión, en la que también involucra al fiscal del caso que tiene como imputada a la expresidenta Cristina Kirchner.
La detención de D’Alessio se produjo en la tarde de este viernes por orden del juez federal de Dolores Alejo Ramos Padilla en el domicilio del abogado, ubicado en el exclusivo country Saint Thomas, en la localidad bonaerense de Canning. El magistrado ya había ordenado realizar allí una serie de allanamientos.
D´Alessio fue arrestado por personal de Prefectura Naval Argentina (PNA) tras la orden del juez y quedará incomunicado hasta ser indagado este sábado en el juzgado de Dolores.
Tras conocerse públicamente los hechos, Stornelli negó su participación en la trama y denunció al abogado por defraudación, un delito aplicado al "que defraudare, con pretexto de supuesta remuneración a los jueces u otros empleados públicos".
No obstante, entre las pruebas aportadas por el empresario figuran imágenes de un encuentro entre Stornelli y el abogado detenido, y en las conversaciones, el propio D'Alessio afirma ser amigo del fiscal. Además, asegura que, a través de ese mecanismo, Stornelli y el juez de la causa 'de los cuadernos', Claudio Bonadio, recaudaron "10, 12 palos [millones de dólares]" presionando a empresarios por la misma vía.
En uno de los diálogos grabados, D'Alessio afirma que su gestión será gratis, pero que es imprescindible "una atención con Carlos [Stornelli]".
La 'causa de los cuadernos' investiga el presunto pago de sobornos a entonces funcionarios del Gobierno de Cristina Kirchner, quien fue citada nuevamente a declarar como imputada, por parte de empresarios contratados para la obra pública.