Elliott Abrams, enviado especial de EE.UU. para Venezuela, aseguró que en caso de que el autoproclamado presidente de Venezuela, Juan Guaidó, sea arrestado luego de su regreso al país, esto provocará la reacción inmediata de muchos países.
"Verán una considerable reacción alrededor del mundo si detienen o perjudican al presidente interino Guaidó. Espero que ya sea suficiente de reprimir su conducta", señaló Abrams en una alocución a los medios, luego de terminada la sesión del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas este jueves.
Durante su intervención en el marco del Consejo de Seguridad, Abrams acusó a los que se opusieron al texto de EE.UU. para resolver la situación en Venezuela de "proteger" al presidente Nicolás Maduro y "prolongar el sufrimiento de los venezolanos".
El representante estadounidense reiteró que su país tiene la intención de proporcionar un "fuerte apoyo" a Guaidó y aprovechar "todas las oportunidades" para ayudar a los venezolanos. Asimismo, manifestó que Washington está "preocupado por el tema de brindar seguridad a Guaidó cuando regrese a Venezuela".
Al respecto, el representante de Venezuela, Samuel Moncada, afirmó que el destino de Guaidó tras su salida de Colombia es asunto de la Corte Suprema venezolana. "Es importante resaltar que hay instituciones que trabajan además de la Presidencia. Tenemos a la Corte Suprema que se está ocupando de este asunto y anunciará su decisión en su momento. No puedo hablar por ella", afirmó el representante en una rueda de prensa posterior.
Moncada aseguró además que su país se encuentra en un "estado de paz preservada por el Gobierno Constitucional del presidente Maduro", quien en ejercicio de sus facultades legales "garantiza la protección del territorio nacional y del pueblo venezolano".
A finales de enero, el presidente de la Asamblea Nacional Constituyente, Diosdado Cabello, dijo que la seguridad de Guaidó es responsabilidad de "la Embajada americana" en Caracas. "Si hay alguien responsable que algo le pase a ese señor [Guaidó], o a algún dirigente de la oposición, es el mismo imperialismo", mencionó el dirigente.
Por su parte, el asesor de Seguridad Nacional de EE.UU., John Bolton, advirtió que habría "serias consecuencias" para aquellos que intenten, a su juicio, "subvertir la democracia y dañar a Guaidó". En ese entonces, Elliott Abrams ya había manifestado estar "preocupado" por el jefe del parlamento de Venezuela y aseveró que sería un "movimiento extremadamente tonto" que el Gobierno de Venezuela actuara contra el dirigente opositor.
El pasado 25 de enero, la Comisión Interamericana de Derechos Humanoshabía otorgado medidas cautelares en favor de Guaidó al considerar que sus "derechos a la vida e integridad" estaban en situación de riesgo. A comienzos de febrero, sus abogados solicitaron a ese organismo ampliar estas medidas para su representado, al considerar que su detención era "inminente".