Pekín ha aumentado sus reservas de oro durante los dos primeros meses de 2019 desde los 59,94 millones de onzas a 60,26 millones, según los datos del Banco Popular de China. Esta práctica del gigante asiático obedece a un intento de "diversificar sus reservas lejos del dólar estadounidense", según declaró al South China Morning Post en febrero Jeffrey Halley, analista superior de mercado y corredor de divisas de Oanda.
El valor del oro acumulado por la segunda economía del mundo al cierre de este mes de febrero equivale a unos 79.500 millones de dólares y sigue la tendencia al alza iniciada por el tesoro público chino en diciembre del año pasado.
Las datos del Consejo Mundial del Oro indican que en el arranque de 2019 la dinámica positiva en la compra del metal precioso se mantiene a nivel global. Estos números siguen en la línea de un análisis del año pasado, en el que se señaló que este mercado llegó a niveles récord que no se veían desde 1971, con hasta 34.000 toneladas de oro contabilizadas en las reservas mundiales.
En 2018, las compras de oro fueron lideradas por Rusia en su estrategia por disminuir la dependencia del dólar, reduciendo además al mínimo histórico la proporción del dólar estadounidense en sus reservas internacionales.