Este domingo 24 de marzo se realizará en Argentina la multitudinaria marcha por el Día de la Memoria, a 43 años del golpe de Estado ocurrido en ese país en 1976, que dio inicio a la última dictadura cívico militar.
Como cada año, organizaciones de derechos humanos, sociales, gremiales y políticas convocaron a participar de la movilización, que comenzará con una gran concentración en la intersección de 9 de Julio y Avenida de Mayo, en el centro de Buenos Aires, para luego marchar hacia Plaza de Mayo, frente a la Casa de Gobierno.
Allí se realizará un acto central, que culminará con la lectura de un documento firmado por las agrupaciones de familiares de desaparecidos, como Abuelas de Plaza de Mayo, Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, HIJOS, entre otras.
Contra las "políticas de ajuste y represión"
Más allá de las consignas tradicionales de estos encuentros, basadas en el reclamo de 'Nunca Más' y 'Memoria, Verdad y Justicia' por los 30.000 detenidos desaparecidos a manos de la dictadura cívico militar, que administró el país entre 1976 y 1983, se esperan, al igual que en las últimas tres ediciones, fuertes críticas al gobierno del presidente Mauricio Macri, por sus "políticas de ajuste y represión" y por un discurso que no ha caído nada bien entre los organismos de derechos humanos.
Es que, al hablar de los tiempos más oscuros del país, Macri sostuvo que hubo una "guerra sucia" entre las organizaciones políticas armadas y la dictadura militar. Además, un exministro de Cultura de su gestión, Darío Lopérfido, puso en duda en 2016 la cantidad de desaparecidos que dejó el autodenominado 'Proceso de Reorganización Nacional'.
También ha calado hondo el fallo de la Corte Suprema de mayo de 2017, que establecía acortar penas a militares detenidos por delitos de lesa humanidad, bajo la ley del 'dos por uno'. La sentencia motivó una movilización masiva de rechazo en las calles, y finalmente el máximo tribunal dio marcha atrás. Si bien no se trató de una medida del Ejecutivo, sino una cuestión del ámbito judicial, el rechazo a la aplicación de la ley para casos de genocidas fue votado por todos los integrantes de la Corte Suprema, menos por Carlos Rosenkrantz, quien había sido recientemente nombrado por el Gobierno.
Todas las voces
Tal como ocurre en cada movilización del 24 de marzo, las organizaciones políticas y de derechos humanos vinculadas a la izquierda más radical, crítica del kirchnerismo, convocaron también esta vez a marchar en forma "independiente de todos los gobiernos", a través del colectivo Encuentro Memoria, Verdad y Justicia (EMVJ), que tendrá su propio acto.
Junto a ellos marchará Nora Cortiñas, de 89 años, militante y defensora de los derechos humanos en Argentina, cofundadora de la Madres de Plaza de Mayo y posteriormente Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora.
'Norita' perdió a su hijo, Carlos Gustavo Cortiñas, militante peronista en la villa 31 de la Ciudad de Buenos Aires, el 15 de abril de 1977, cuando fue secuestrado por las fuerzas represivas del entonces Gobierno de Jorge Rafael Videla.
En diálogo con a RT, Cortiñas dijo que no se debe hacer foco en las divergencias políticas, sino en la cantidad de gente que se hará presente en la Plaza: "Tenemos que ser miles y miles para repudiar los golpes de Estado y las políticas de este Gobierno. No importa cuántas marchas hagamos. No importan las diferencias. Debemos salir a la calle todos, en todo el país".
Consultada acerca de sus expectativas en un año electoral, la referente de Madres señaló: "Espero siempre el compromiso de la lucha, no bajar los brazos, reivindicar a los luchadores populares de antes y a los de ahora, que están todos los días en la calle defendiendo la patria, el trabajo, la educación, la salud y la libertad". Y agregó que el Gobierno actual "no quiere diálogo" sino "hacer su política". "No está equivocado, es lo que quiere hacer, por eso lo tenemos que cambiar. Y en la calle lo vamos a hacer".
Charly Pisoni es hijo de Rolando Pisoni e Irene Bellocchio, militantes peronistas desaparecidos, vistos por última vez en el Centro Clandestino de Detención "Club Atlético". Es, además, referente de la agrupación HIJOS de Capital Federal. Pisoni coincide en que en esta marcha habrá un clima particular por la cercanía con las elecciones nacionales.
"Nosotros venimos denunciando que el plan económico de este Gobierno es similar al que se implementó durante la dictadura y que continuó en los 90, y es precisamente el plan contra el cual lucharon nuestros padres, porque conlleva a la desocupación, al ajuste y a que se den acciones represivas como las que hemos visto a lo largo de estos años", señaló Pisoni a este medio.
"No solamente estamos, como siempre, recordando a nuestros desaparecidos y levantando sus banderas, sino también denunciando lo que sucede en la actualidad. Ha crecido la violencia institucional, se han menguado las políticas de derechos humanos reduciendo los presupuestos de las distintas áreas, no solamente las referidas a la Memoria, Verdad y Justicia, sino también las que tienen que ver con educación, o con la construcción de viviendas", analizó.
Protestas en 'año clave'
En la misma sintonía opina Horacio Pietragalla, hijo de desaparecidos que fue apropiado y luego restituido por las Abuelas de Plaza de Mayo, convirtiéndose en el nieto recuperado número 75. Para el hoy diputado del Frente para la Victoria (FPV), este es "un año clave", en el que "hay que fortalecer la memoria, salir a manifestarse".
Según Pietragalla, la Argentina atraviesa un "claro retroceso" desde el momento que Cambiemos llegó al poder. "Antes de ser presidente, Macri decía que los derechos humanos eran un 'curro' (robo, estafa). Y que iba a acabar con eso". El legislador se refiere a declaraciones de 2014, cuando, en el marco de las investigaciones por desvío de fondos por parte de la fundación Madres de Plaza de Mayo para construcción de viviendas, el entonces Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires dijo que cuando fuera presidente, se acabarían "los curros en derechos humanos".
Para el legislador kirchnerista, la región se enfrenta a "una segunda etapa del Plan Cóndor", donde no hace falta la violencia armada sino otro tipo de mecanismos que tienen por objetivo erradicar cualquier posibilidad de que proyectos nacionales y populares alcancen el poder, perpetrando una menor distribución de la riqueza.
"Hoy hay presos políticos y un claro caso de 'lawfare' [guerra jurídica] entre el poder real, la corporación judicial, los medios de comunicación y el poder político accionando en mentiras y operaciones en contra de la oposición para anularla. Esto no se ve solo acá sino en todos los países de la región, y está orquestado por la embajada de EE.UU.", concluyó Pietragalla.
Emmanuel Gentile