El embajador de Rusia en el Reino Unido, Alexánder Yakovenko, se ha reunido este sábado con Charlie Rowley, el ciudadano británico que sobrevivió al ataque con un agente nervioso paralizante ―Novichok, según las autoridades británicas― y su hermano Matthew para hablar sobre la situación e intentar aclarar dudas. Se reunieron en la instalación diplomática rusa en Londres, donde Yakovenko les mostró la Embajada y entregó libros y copias del informe 'Salisbury: preguntas sin respuestas', elaborado por diplomáticos rusos.
Rowley y su novia Dawn Sturgess resultaron intoxicados por el agente nervioso en la localidad inglesa de Amesbury el 30 de junio. La mujer falleció cuatro días después.
"No tienen sus versiones [de lo sucedido], viven de lo que está escrito en los periódicos británicos. A mi pregunta de si Rowley sabe con qué lo trataban los hermanos, contestaron que no lo saben. Rowley sabe con qué fue envenenado solamente por los informes policiales", declaró el embajador ruso ante los periodistas. Yakovenko sugirió verificar todas las declaraciones y acciones de las autoridades británicas, entre ello, comprobar cómo exactamente trataron los médicos a los envenenados.
El embajador estimó que "tal vez el 80 %" de lo que les dijo a los Rowley fue una "revelación total" para ellos. "Están desolados por el hecho de que pese al tratamiento médico recibido por Rowley, su salud va empeorando gradualmente y en realidad, según cree él, no se sabe qué le pasará", indicó Yakovenko, agregando que Rowley "se mostró interesado en someterse a un análisis médico en un tercer país".
"Sigo pensando que Rusia perpetró el ataque"
Por su parte, Charlie Rowley afirmó en una entrevista con The Sunday Mirror que realmente no obtuvo respuestas en la reunión con el embajador ruso, que y solo recibió "propaganda rusa". "Fui a preguntarles: '¿Por qué su país mató a mi novia?'", señaló Rowley, al que Yakovenko aseguró que Rusia no tenía nada que ver con lo sucedido en Amesbury ni en Salisbury.
"El embajador seguía diciendo que la sustancia definitivamente no era Novichok fabricado por ellos, porque si lo fuera habría matado a todos", comentó la víctima del envenenamiento. "Me alegro de haberlo conocido y creo que descubrí algunas cosas que no sabía antes. Pero sigo pensando que Rusia perpetró el ataque".
El embajador afirmó que "Rusia solo tiene pequeñas cantidades de Novichok, porque lo usan como antídoto y no lo fabrican más", y que actualmente esta sustancia también está a disposición del laboratorio británico de Porton Down. Además, sostuvo que la sustancia solo se produce en la República Checa y EE.UU., agregando que este último país es el único lugar donde podría haber sido producido el Novichok utilizado en los ataques en el Reino Unido, contó Rowley.
Según Rowley, Yakovenko también señaló que le pareció raro que su novia fuera cremada, al igual que el gato de Serguéi Skripal, impidiendo llevar a cabo pruebas en los cuerpos, a lo que Rowley respondió que "era un veneno tóxico". "Parecía que le resultaba difícil asimilarlo", agregó.
"Esta reunión es una cosa importante porque da un paso más en el esclarecimiento de lo que realmente ha sucedido con este presunto envenenamiento por parte de las autoridades rusas", comentó a RT el periodista y director del periódico The Cuban Nation, Pedro González Munné.
Caso Skripal
El 4 de marzo de 2018 en la ciudad de Salisbury, el exagente doble ruso Serguéi Skripal y su hija Yulia fueron envenenados deliberadamente con el agente nervioso Novichok. Ambos lograron sobrevivir al ataque y de momento se desconoce dónde se encuentran.
Las autoridades británicas, que responsabilizan por el ataque al Kremlin, afirman que los dos no quieren contactarse con representantes de la Embajada rusa, mientras Moscú, que niega su involucración en el caso y afirma que lo acusan sin pruebas, señala que no puede constatar si los Skripal están vivos, ya que el Reino Unido se niega a facilitar contacto alguno entre la familia y los diplomáticos rusos.
Según Londres, detrás del ataque están los rusos que se presentaron como "Alexánder Petrov" y "Ruslán Boshírov". El grupo Bellingcat, en colaboración con The Insider, afirmó que Petrov es en realidad Alexánder Mishkin, un supuesto doctor ligado al Departamento Central de Inteligencia de Rusia (GRU), mientras que el verdadero nombre de Boshírov es Anatoli Chepiga, un agente del Departamento Central de Inteligencia de Rusia. La información no fue confirmada por el Gobierno ruso, que insistió en que ambos hombres son civiles.