Fragmentos del registrador de datos de vuelo del cazabombardero de quinta generación F-35A de la Fuerza de Autodefensa Aérea de Japón, que se estrelló a principios de abril, fueron hallados en el océano Pacífico cerca del lugar del siniestro, ha anunciado este martes el ministro de Defensa japonés, Takeshi Iwaya.
Según el funcionario, citado por la agencia Kyodo, los restos de la caja negra encontrados durante una operación de búsqueda no contienen los datos del último vuelo. Las autoridades japonesas han subrayado que continuarán la búsqueda de las partes restantes del registrador de datos de vuelo del F-35A accidentado.
Suspensión de los vuelos
La suspensión de los vuelos de los cazas furtivos F-35A japoneses se produjo el 9 de abril, después de que el ministro de Defensa anunciara que las autoridades niponas perdieron el rastro de una de estas aeronaves horas antes.
"Por el momento no volaremos los doce aviones F-35A restantes. En primer lugar, nos gustaría hacer un esfuerzo en la búsqueda, el rescate y la investigación de las causas", declaró entonces Iwaya.
En esta misma jornada hacia las 19:30 —hora local—, un cazabombardero F-35A desapareció de los radares a unos 135 kilómetros al este de la base aérea de Misawa (prefectura de Aomori), durante una sesión de entrenamiento. El piloto de la aeronave se encuentra asimismo desaparecido. Unidades de rescate de la Fuerza de Autodefensa Aérea de Japón y embarcaciones de la Guardia Costera aúnan esfuerzos en las labores de búsqueda.