El vicepresidente y la segunda dama de Estados Unidos, Mike y Karen Pence, han visitado varios centros de la Patrulla Fronteriza estadounidense en el sur de su país acompañados por una delegación bipartidista del Comité Judicial del Senado y un grupo de reporteros este 12 de julio.
Un informe reciente de la oficina del Inspector General del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) y múltiples reportajes de la prensa local alertaron sobre las condiciones de hacinamiento extremo y riesgo para la salud de las personas encerradas por la falta de saneamiento y alimentos adecuados.
Condiciones lamentables
Josh Dawsey, periodista del diario Washington Post, se encontraba en la delegación que visitó el Centro de Procesamiento Central en McAllen (Texas, EE.UU.) y vio a "casi 400 hombres enjaulados y sin catres" que tenían que dormir sobre el suelo de hormigón y se encontraban en un lugar donde "el hedor era horrible", según tuiteó su compañero David Nakamura.
Ese reportero explicó que durante esa visita de 90 segundos las personas encerradas se quejaban de que se encontraban allí "desde hacía 40 días o más", querían cepillarse los dientes y no se habían duchado "durante semanas".
La comitiva también accedió a otra instalación dividida en cuartos divididos en donde están detenidos hombres con hijos, mujeres, menores no acompañados y hasta familias enteras que cubren el suelo o se envuelven en mantas fabricadas con papel de aluminio, según el canal ABC News.
En este lugar varios menores veían la televisión y, cuando les preguntaron si estaban cómodos y tenían suficiente comida con la ayuda de un traductor, se limitaron a asentir. Dos de esos niños contaron que les llevó dos meses llegar hasta EE.UU.
Pence: "No es una crisis manufacturada"
Al finalizar el recorrido, el vicepresidente de EE.UU. admitió que no estaba sorprendido por lo que habían visto y horas después reconoció en conferencia de prensa que "esto no es una crisis manufacturada", sino "real".
Para Pence, la "superpoblada" instalación de McAllen es "un excelente ejemplo" de que su país tiene un sistema "sobrecargado" y necesita "asegurar ya" sus fronteras y "afrontar esta crisis humanitaria".
Este alto cargo estadounidense recordó que a principios de año el presidente de EE.UU., Donald Trump, ya declaró una emergencia nacional y reiteró que "México sigue haciendo más que los demócratas del Congreso para asegurar nuestra frontera".
Finalmente, Mike Pence agradeció a los funcionarios de la Patrulla Fronteriza de EE.UU. el trabajo "incansable" que desempeñan a diario y "mantiene seguro al pueblo estadounidense".