Un video del sistema de vigilancia de una prisión de Edimburgo (Escocia, Reino Unido), difundido el pasado domingo, ha revelado los detalles del caso de un recluso que murió tras ser violentamente reducido por los guardias del penal, informa The Daily Record.
El hecho ocurrió en marzo del 2015, pero fue la reciente decisión de las autoridades de ofrecer inmunidad procesal a todos los carceleros involucrados a cambio de evidencias en la investigación, lo que empujó a los familiares de Allan Marshall, el fallecido, a difundir la grabación.
El hombre, de 30 años, fue arrestado tras protagonizar un altercado con un vigilante de un club y no pudo recuperar su libertad por unas multas impagas. En el momento de morir llevaba un mes en el penal.
Prison chiefs made a late-night legal bid to block the publishing of harrowing video and pictures showing the final conscious moment of death-in-custody prisoner Allan Marshall.https://t.co/Mj5nQbA4Sh
— The Daily Record (@Daily_Record) August 25, 2019
Zona ciega
En el video se aprecia cómo al menos 13 guardias de seguridad arrastran a Marshall por el suelo desde las duchas, tirándolo de los pies mientras el hombre estaba desnudo.
Durante los 27 minutos previos, los agentes forcejearon con el reo, aunque esa parte de las instalaciones no cuenta con cámaras de vigilancia. Los guardias explicaron que decidieron reducirlo porque el hombre supuestamente actuaba raro y rezaba en voz alta.
"¡Déjenme respirar!"
Los agentes colocaron a Marshall boca abajo, algunos le presionaron la espalda con la rodilla y otros incluso le pisaron la cabeza y posteriormente cubrieron su rostro con una toalla. Según los familiares, esto pudo contribuir al desenlace fatal, ya que el difunto había padecido de asma en su juventud.
Asimismo, otros reclusos testificaron haber escuchado que Marshall gritó "quítense de encima" y "no puedo respirar". Cuando el hombre dejó de respirar, los paramédicos le practicaron masaje cardiopulmonar y se lo llevaron al hospital, donde permaneció cuatro días en coma inducido antes de fallecer por insuficiencia cardíaca.
Mientras era retirado en camilla, los guardias sonreían con satisfacción y reían, e incluso uno de ellos mostró un pulgar arriba a la cámara. Para los familiares, el material gráfico es suficiente para procesarlos cuando menos por asalto. Mientras tanto, el caso está siendo investigado como un accidente.
