La Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) han expresado este viernes su preocupación por la proclamación del estado de excepción en Ecuador, ante las fuertes protestas en varias ciudades del país contra las medidas económicas decretadas por el Ejecutivo de Lenín Moreno.
El relator para Ecuador del Comité de la ONU de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, Mikel Mancisidor, ha rechazado "que los derechos a la libertad de asociación, asamblea y movimiento hayan sido suspendidos" en el país, subrayando que se trata de "libertades muy importantes". Asimismo, ha cuestionado la justificación del estado de excepción, poniendo en duda que "la situación en Ecuador sea tan extrema como para amenazar la integridad del Estado".
Por su parte, la CIDH ha expresado en su cuenta de Twitter su "preocupación" por el "uso excesivo de la fuerza por parte de la Policía" y por la situación de los numerosos detenidos, así como de los heridos que han sido reportados y de los periodistas agredidos.
El Gobierno de Moreno enfrenta una fuerte contestación social en todo el país, con disturbios en varias ciudades, desde que anunció el pasado martes una serie de medidas y reformas económicas que sus detractores denominan 'el paquetazo'.
Como reacción a la oleada de manifestaciones, el mandatario ecuatoriano decretó este jueves el estado de excepción en todo el país, "para precautelar el orden, la seguridad ciudadana y con el fin de controlar a quienes pretenden provocar caos", según explicó en un tuit.