EE.UU. "no apoyará ni participará" en la "operación planificada durante mucho tiempo" que Turquía pondrá en marcha "pronto" en el norte de Siria porque las tropas estadounidenses ya no estarán en "las inmediaciones", ha anunciado la noche de este 6 de octubre, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Stephanie Grisham.
Ha especificado que Washington ha tomado esta decisión tras una conversación telefónica que Donald Trump ha mantenido con el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan.
De acuerdo con la Casa Blanca, EE.UU. "ha derrotado al 'califato' territorial del Estado Islámico" y Ankara "ahora será responsable" de todos los militantes de esta organización terrorista capturados en esa área durante los últimos dos años.
Asimismo, ha señalado que el Gobierno de EE.UU. "presionó" a Francia, Alemania y otras naciones europeas —"de donde llegaron muchos combatientes del EI capturados"— para que se los llevaran de regreso, "pero no los querían y se negaron", mientras que Washington "no los retendrá" porque podrían suponer "un gran costo para el contribuyente estadounidense".
Grisham, tras revelar la postura de EE.UU. sobre la futura operación turca en el norte de Siria, indicó que "hay alrededor de 1.000 soldados estadounidenses" en la zona. Además, un alto funcionario estadounidense, citado por AP, dijo que las tropas de EE.UU. se retirarán del área, y potencialmente abandonarán el país por completo si estalla un conflicto generalizado entre las fuerzas turcas y kurdas.
Por su parte, el portavoz presidencial turco, Ibrahim Kalin, ha anunciado a través de su cuenta en Twitter que Ankara creará "una zona segura" en Siria con el objetivo de "limpiar los elementos de terrorismo", asegurar las fronteras de Turquía y garantizar el retorno seguro de los refugiados.
Turquía acumula fuerzas en la frontera turco-siria
Turquía está desplegando fuerzas adicionales en la frontera siria después de que el presidente Recep Tayyip Erdogan declarara el sábado que Ankara está lista para empezar "hoy o mañana" su propia operación militar en el norte del país árabe.
El objetivo, según el mandatario, es eliminar de la zona a las fuerzas kurdas de las Unidades de Protección Popular (YPG), que dominan la región y a las que Turquía denomina terroristas. También explicó que Ankara decidió iniciar un operativo unilateral en el noroeste de Siria tras el fracaso de los intentos de crear una zona de seguridad en la región junto con EE.UU.
Decenas de fotos y videos compartidos en las redes sociales y programas de televisión muestran a los convoyes militares turcos llegando a la frontera, confirmando los dichos de Erdogan.
Zona de seguridad conjunta
El pasado 7 de agosto, EE.UU. y Turquía acordaron establecer una zona segura en la frontera siria que, según Ankara, debería quedar liberada de las YPG, así como desarrollar un 'corredor de paz' para facilitar el movimiento de sirios desplazados que desean regresar a su tierra natal.
Sin embargo, en su reciente discurso Erdogan denunció que Washington está siendo muy lento y calificó las perspectivas de establecer una zona segura conjunta como "un cuento de hadas".
Ni EE.UU. ni Turquía se molestaron en consultar a Damasco, que ha criticado repetidamente todos sus planes conjuntos y unilaterales como violaciones flagrantes de la soberanía y la integridad territorial de Siria.