El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, anunció este jueves que no va a emitir ningún decreto sobre subsidios a los combustibles en el país, "mientras el diálogo no haya concluido".
En declaraciones a la prensa, tras culminar una ronda de conversaciones con representantes de varios sectores del país, Moreno recalcó que sí se hará un nuevo decreto para "focalizar de manera adecuada ese subsidio".
El subsidio a los combustibles ha sido un tema de debate en Ecuador desde el primer día de octubre, cuando el presidente Moreno anunció la eliminación de los subsidios a las gasolinas extra y ecopaís, así como al diésel. Medida que fue ratificada mediante el Decreto Ejecutivo 883, del 2 de octubre, y que provocó el aumento de sus precios. Esta política de Estado respondía al acuerdo alcanzado entre Quito y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
La decisión provocó fuertes manifestaciones en el país, que inició el sector transportista y luego lideró el movimiento indígena, agrupado en la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (CONAIE). Las protestas duraron 11 días, con un saldo de 10 muertos —aunque esta semana se sumó una víctima fatal más que había resultado herida— y culminó con la instalación de una mesa de diálogo, el 13 de octubre, donde se acordó la derogatoria del decreto 883 y la redacción de un nuevo texto.
En las declaraciones de este jueves, Moreno insistió en que los subsidios a los combustibles están bajo un sistema que "no es justo". Por ello, señaló que el objetivo es encontrar "el mejor mecanismo" para crear "un subsidio que sea justo, equitativo, que esté focalizado", específicamente que sirva "para no favorecer a los que más tienen y desfavorecer a los que menos tienen [...] los grupos más vulnerables".
La propuesta de la CONAIE
Desde la CONAIE han informado que antes de redactar un nuevo decreto sobre el subsidio a los combustibles, es necesario estudiar toda la estructura económica del país.
Para ello, el movimiento indígena, junto a otras 200 organizaciones, ha elaborado una propuesta de un nuevo modelo económico para la nación, que presentarán, este mismo jueves, a la oficina de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Ecuador y a la Conferencia Episcopal Ecuatoriana, entes mediadores en el diálogo con el Gobierno de Moreno.
La propuesta aún no se ha dado a conocer; sin embargo, se adelantó que tienen seis ejes: fiscal, monetario, corrupción, sectorial, y otros dos.
"Si no se resuelve toda la estructura económica del país con estos ejes no se puede tocar" el tema de los subsidios a los combustibles, dijo Leonidas Iza, dirigente del Movimiento Indígena y Campesino de Cotopaxi (MICC).
Acusaciones de Moreno
Moreno también se refirió a los hechos vandálicos que ocurrieron durante las manifestaciones en su contra e insistió que fueron actos realizados por "grupos delincuenciales perfectamente identificados con el correísmo", en referencia a seguidores del expresidente Rafael Correa; aunque hasta ahora no se ha dado a conocer a ninguno de los participantes, de los 30 que supuestamente fueron detenidos.
Indicó que una prueba de ello fue la quema al edificio de la Contraloría General del Estado, en el centro de Quito.
Según Moreno, estos actores se dirigieron "específicamente a donde estaban los expedientes de los procesos que se seguía a la gente corrupta del gobierno anterior", lo cual les da el indicio de que "fue totalmente direccionado".
El mandatario añadió que se trató de "un grupo delincuencial que parece que venía cocinando esto desde hace mucho tiempo" y que son "evidencias solamente visibles en movimientos y comportamientos terroristas".
Durante las manifestaciones, ya Moreno había hecho acusaciones contra Correa y el presidente venezolano, Nicolás Maduro, de estar detrás de un plan para desestabilizar a su Gobierno.