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El FMI afirma que la deuda de Argentina "no es sostenible" y hace una propuesta a acreedores privados: ¿en qué consiste?
El Fondo Monetario Internacional emitió un comunicado con base en el análisis que una misión técnica realizó en Buenos Aires.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha declarado este miércoles que la deuda de Argentina "no es sostenible", algo que ya había marcado el Gobierno de Alberto Fernández, por lo que el organismo pidió a sus acreedores privados que acepten una quita "apreciable".
El organismo internacional publicó un comunicado, bajo la firma de la misión técnica que viajó a Buenos Aires la semana pasada, para iniciar un análisis del caso.
"El personal del FMI notó que la capacidad de enfrentar el nivel y el servicio de la deuda pública de Argentina se deterioró significativamente en comparación con el último análisis de sostenibilidad de la deuda", publicado en julio de 2019, señala el texto.
Declaración del equipo técnico del FMI sobre #Argentina. https://t.co/1FxdaTeW5Q
— FMI (@FMInoticias) February 19, 2020
"No sostenible"
Para el equipo que visitó el país suramericano, a partir de entonces se han "materializado" una serie de riesgos, relacionados a la volatilidad del tipo de cambio, a la imposibilidad de refinanciar sus compromisos, o a la necesidad de buscar financiamiento externo, "variable que por lo general es un predictor de crisis en economías emergentes", sostienen.
Por ello, el Fondo "ahora evalúa que la deuda de Argentina no es sostenible".
La visión del FMI es que "el superávit primario —diferencial positivo entre lo que recauda el Estado y lo que gasta— que se necesitaría para reducir la deuda pública", así como las condiciones que puedan evitar un 'default' y recuperar el crecimiento, no son "económicamente ni políticamente factibles".
"Una contribución apreciable"
Para el FMI, Argentina "requiere de una operación de deuda definitiva, que genere una contribución apreciable de los acreedores privados, para ayudar a restaurar la sostenibilidad de la deuda con una alta probabilidad".
Por otra parte, el Fondo se comprometió a "colaborar" con los acreedores privados para "maximizar su participación en la eventual operación de deuda", así como también a continuar el diálogo con el Gobierno del país suramericano.
En términos concretos, lo que propone el organismo que preside Kristalina Georgieva es que los fondos de inversión internacionales, que han adquirido bonos de deuda de Argentina, acepten una quita de lo que deberían cobrar, bajo condiciones posibles de afrontar para Buenos Aires.
Según se desprende del comunicado, el FMI apoya el plan económico de Alberto Fernández: "Las autoridades argentinas están actuando para resolver la difícil situación económica y social que enfrenta el país. Han implementado un conjunto de medidas para atacar la problemática de la pobreza y estabilizar la economía", a la vez que buscan "garantizar una resolución sostenible y ordenada de su situación de deuda".
Deuda "impagable" y negociaciones a contrarreloj
El Gobierno de Argentina se encuentra negociando, tanto con el Fondo como con sus acreedores privados, una reestructuración de sus compromisos, que apunta principalmente a extender plazos, reducir montos de capital y bajar los intereses.
Ya en septiembre del año pasado, el ahora presidente Alberto Fernández había advertido que la deuda del país era "impagable" bajo las condiciones establecidas entonces.
Hace dos semanas, tras una gira bastante fructífera de Fernández por Europa, donde recibió el respaldo de Francia, Italia y España, de cara a la renegociación de la deuda, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner sostuvo que el FMI debería aceptar una quita del total del acuerdo, dado que, según consideró, el dinero pedido por el anterior Gobierno de Mauricio Macri fue utilizado para permitir una "fuga de capitales", algo que los estatutos del Fondo prohiben.
Sin embargo, el organismo de crédito, mediante su portavoz, Gerry Rice, señaló que eso violaría las reglas del FMI. El planteo de la exmandataria es que si el Fondo permitió la fuga de capitales, transgrediendo sus propios estatutos, por qué no podría pasar por alto otra norma para avalar la quita.
Argentina celebra el reconocimiento del FMI
El mandatario argentino, Alberto Fernández, celebró que el FMI admitiera que deuda publica de Argentina "no es sostenible", y consideró que el anuncio es un reconocimiento a la posición de Buenos Aires respecto a los procesos de endeudamiento.
"Si todas las partes demuestran voluntad de acordar, podremos volver a crecer, honraremos nuestros compromisos y volveremos a tener una Argentina de pie", afirmó Fernández, a través de su cuenta en Twitter.
De igual forma, el Ministerio de Economía emitió una nota donde se destacan las coincidencias con el organismo multilateral en lo que refiere a la crisis de la deuda.
"El personal del organismo coincidió con el ministro de Economía [Martín Guzmán] y sus equipos en que se deterioró significativamente la capacidad de enfrentar el nivel y el servicio de los intereses de la deuda pública de Argentina", apunta el texto, que reitera la disposición del gobierno Alberto Fernández de seguir "dialogando estrechamente con el personal del FMI".
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