Perú gestiona la compra de un hospital como el de Wuhan para atender pacientes con coronavirus
El Gobierno de Perú está gestionando la adquisición de un hospital como el que fue construido en diez días en la ciudad china de Wuhan para tratar a pacientes con coronavirus.
Así lo informó la ministra de Salud peruana, Elizabeth Hinostroza, quien afirmó en una entrevista de El Comercio que las autoridades de su país mantienen conversaciones con los representantes diplomáticos del país asiático. "Estamos viendo, a través de la Embajada, la posibilidad de adquirirlo. Estamos en eso".
Hinostroza aseveró que su Gobierno mantiene contacto "permanente" con China "porque ellos son los expertos". Hasta ahora el país andino ha registrado 234 personas infectadas y tres fallecidos por el coronavirus.
Un primer hospital en Cuzco
La ministra de Salud manifestó que el Ejecutivo se encuentra evaluando en cuáles zonas podrían ubicarse el hospital desmontable con capacidad de mil camas.
Entre las ciudades donde podría ubicarse el centro médico de Huoshenshan están Cuzco, la capital histórica y turística del país donde se encuentra Machu Picchu e Iquitos, la ciudad más grande de la amazonía peruana, que solo mantiene conexión aérea y fluvial con el resto del país.
En Cusco, hace dos días, los representantes que construyeron el hospital chino realizaron una reunión técnica con el gobernador regional, Jean Paul Benavente, y manifestaron que el centro de salud, cuya construcción llevaría dos meses porque hay que trasladar material, podría albergar 200 camas, de las cuales 40 serían para la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), recoge Gestión.
Las autoridades sanitarias han dispuesto 300 camas de emergencia, con posibilidad de llegar a 400, para atender a pacientes con coronavirus, según ha dicho la ministra. Además están adquiriendo ventiladores y destinaron un hospital específico para los pacientes contagiados que tiene 200 camas y 50 camas de UCI.
El presidente Martín Vizcarra decretó el pasado lunes el estado de emergencia nacional, vigente hasta el 31 de marzo, y una "inmovilización social obligatoria", de 8:00 de la noche a 5:00 de la mañana, ante el incremento de casos de coronavirus en el país suramericano.