Alrededor de 1.700 millones de personas, o uno de cada cinco habitantes del planeta, se encuentra en autoaislamiento, según lo informado por las respectivas autoridades como medida contra una mayor propagación del coronavirus, informa The Guardian.
El Reino Unido se convirtió en el último país en introducir estrictas restricciones al movimiento de personas y la realización de actividades, vigentes desde la noche del lunes.
El primer ministro, Boris Johnson, ordenó ayer que los ciudadanos se queden en casa a menos que deban salir para comprar alimentos, ir al trabajo, buscar atención médica o hacer ejercicio.
"Si no siguen las reglas, la Policía tendrá el poder para hacerlas cumplir", aseguró Johnson en un discurso televisado, e instó a la gente a no reunirse con amigos o familiares que no viven con ellos.
En ese sentido, todas las reuniones de más de dos personas en público, excluyendo a las personas con las que viven, han sido prohibidas.
Johnson anunció también el cierre de todas las tiendas que venden productos no esenciales, como así también de bibliotecas, gimnasios y lugares de culto. Además, dispuso que todos los eventos sociales, a excepción de los funerales, sean cancelados. En particular, se suspenden las bodas y otras grandes reuniones, para que los ciudadanos cumplan con las instrucciones de quedarse en casa con el fin de mitigar la pandemia.
El primer ministro también recomendó a los británicos salir a comprar alimentos "con la menor frecuencia posible" y, de ser posible, hacerlo mediante los servicios de entrega a domicilio.
El número de infectados con el nuevo coronavirus SARS-CoV-2 ha superado los 395.000 en todo el planeta, mientras que el de muertos suma más de 17.000, según datos del portal Worldometer.
La mayoría de los contagios fueron registrados en China (81.171), Italia (63.927), EE.UU. (46.168), España (39.673) y Alemania (31.260).