La Fuerza Aérea de los Estados Unidos retiró esta semana cinco bombarderos estratégicos B-52 con capacidad nuclear de su base en la isla de Guam, en el Pacífico, tan solo días después de que participaran en ejercicios militares de "demostración de fuerza".
Este acontecimiento marcó el final de la misión de presencia continua de bombarderos en la base aérea de Andersen, que durante cerca de 16 años prestaron sus servicios en la región, según el portal The War Zone.
Los B-52H Stratofortress fueron vistos el jueves volando de Guam hacia la base aérea de Minot, en Dakota del Norte, según mostró el rastreador de aeronaves en línea Aircraft Spots.
La portavoz del comando estratégico estadounidense, Kate Atanasoff, señaló que estas aeronaves tendrán su base permanente en el interior del país pudiendo regresar a la región en el momento en que lo requieran. Explicó además que la transición se debe a "un enfoque que permite a los bombarderos estratégicos operar hacia adelante en la región Indo-Pacífico desde una gama más amplia de lugares en el extranjero".
La partida de los bombarderos también fue revelada accidentalmente por el Pentágono el pasado 14 de abril, cuando una foto de ellos fue titulada: "Última misión de presencia de bombarderos continuos en Guam", en el sitio web del Servicio de Distribución de Información Visual de Defensa (DVIDS, por sus siglas en inglés), aunque luego el texto fue cambiado.
Apenas pocos días antes de producirse el retiro de las aeronaves, en la base aérea se realizaron ejercicios militares que buscaban demostrar el poderío aéreo de EE.UU. Además de los cinco bombarderos, participaron seis aviones cisterna KC-135 Stratotanker, un helicóptero Knighthawk MH-60S y drones de vigilancia. Según Ralph Cossa, exoficial de la Fuerza Aérea, la exhibición pudo ser un mensaje dirigido a China y Corea del Norte, recoge Military.com.
Recientemente el portaviones nuclear estadounidense USS Theodore Roosevelt, que permanece anclado en la isla de Guam, se ha visto afectado directamente por la pandemia de coronavirus. En la embarcación al menos un marinero ha muerto y 550 miembros de la tripulación dieron positivo en las pruebas de covid-19.