El Embajador de Venezuela para las Naciones Unidas (ONU), Samuel Moncada, denunció este miércoles ante el Consejo de Seguridad del organismo que Colombia y EE.UU. organizaron, entrenaron, financiaron y protegieron a "grupos armados de mercenarios y terroristas", implicados en el intento fallido de incursión marítima a territorio venezolano durante el pasado 3 de mayo.
"Se trata de un crimen de lesa humanidad, ejecutado con circunstancias agravantes, pues usó como ventaja militar la presencia de una mortal pandemia que afecta a toda la humanidad", indica la denuncia.
En este mismo sentido, el documento también alerta sobre el hallazgo de tres lanchas de la Armada colombiana, artilladas con dos ametralladoras calibre.50 y cuatro M601, en las riberas del río Orinoco, el pasado 9 de mayo. "Todas las armas estaban aprovisionadas con miles de cartuchos de munición, suficientes para sostener un ataque armado en gran escala".
Asimismo, el texto asegura que este intento fallido de incursión develó cómo "un sector extremista de la oposición venezolana", liderado por el diputado Juan Guaidó, impulsa el terrorismo y el asesinato del presidente Nicolás Maduro, a través de un contrato suscrito "con dinero de las cuentas robadas" a Venezuela por parte del gobierno de EE.UU., por medio de sanciones unilaterales.
Otros implicados
Según esta denuncia, el contrato también contempla la existencia de un financiamiento privado, mediante un "préstamo puente" de empresarios. "Entre ellos se encuentra el ciudadano estadounidense Roen Kraft, heredero de una conocida corporación multinacional productora de alimentos".
A su vez, el texto agrega que el armamento de guerra usado en la operación fue adquirido por la empresa Silvercorp USA del exboina verde Jordan Goudreau, a la compañía estadounidense High-End Defense Solutions, registrada en el estado de la Florida, por más de 150.000 dolares.
"Según el ordenamiento jurídico estadounidense, cualquier empresa que suministre armas para ser llevadas al extranjero debe contar con una autorización emitida previamente por el Departamento de Estado de EE.UU", lo que, a juicio de las autoridades venezolanas, habla del papel desempeñado por Washington en esta operación.
Rechazo a la impunidad
Por último, la representación de Venezuela ante la ONU mostró su preocupación por la impunidad que fomentado los gobiernos de Colombia y EE.UU., al negarse a realizar las investigaciones sobre estos ataques y apresar a los responsables.
"Denunciamos y condenamos la protección que brinda el gobierno estadounidense tanto a Jordan Goudreau como al ciudadano venezolano Javier Nieto Quintero, organizadores del plan terrorista, quienes gozan hoy de refugio seguro en EE.UU.", reza el documento.
De igual forma, el oficio denuncia que el excomisario Iván Simonovis, prófugo de la justicia venezolana, "vive en Washington y es protegido por el gobierno estadounidense" para que cumpla funciones de enlace con agencias como la DEA, la CIA y el Departamento de Seguridad.
Hasta este miércoles, la cifra de detenidos por presuntamente estar involucrados en estos hechos es de 47, incluyendo a Luke Denman y Airan Berry, dos exmilitares de las Fuerzas Especiales de EE.UU., veteranos de guerra y oriundos de Texas.