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Rusia bota una nueva fragata diseñada para portar misiles hipersónicos
Construidas en los astilleros rusos de Severnaya Verf, estas naves están dotadas con tecnologías de sigilo y listas para utilizar el más novedoso armamento misilístico.
Con el nombre de Admiral Golovkó, la tercera fragata rusa del proyecto 22350 fue botada al agua este viernes en San Petersburgo, en los astilleros de Severnaya Verf.
La Admiral Golovkó es la tercera en su estilo y dentro del mencionado proyecto 22350, dirigido a la armadura de naves multifuncionales de alta mar y construidas según las tecnologías de sigilo; esto es, con amplio uso de materiales compuestos y otras medidas que minimizan su sección transversal ante el radar. Para ese mismo objetivo se usa una nueva geometría de casco y de superestructura del navío.
Pensados para llevar a cabo tareas en alta mar, como parte de agrupaciones navales y en estrecha coordinación con aviones y submarinos, estos buques podrían ser los primeros en portar los novedosos misiles hipersónicos Tsirkón, que engrosarán los arsenales de la Marina en los proximos años, según el almirante Nikolái Evménov, comandante en jefe de la Armada rusa.
Con eslora de 135 metros y una manga de 15 metros, las fragatas del Proyecto 22350 tienen un desplazamiento de 4.500 toneladas. Al día de hoy están armadas con piezas de artillera naval A-192 Armat de 130 milímetros, y sus 32 lanzadores de misiles cuentan con un arsenal de 128 proyectiles de esa naturaleza, que incluyen los antibuque Onix, los Kalibr-NK y los antiaéreos Poliment-Redut.
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