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Rusia declara personas no gratas a dos funcionarios de la Embajada de la República Checa en Moscú
La medida se toma en respuesta a una acción equivalente por parte de Praga a principios de junio.
Moscú ha declarado personas no gratas a dos funcionarios de la Embajada de la República Checa en la capital rusa, según ha anunciado este 15 de junio el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso. Se precisa que los dos ciudadanos checos, así como sus familias, deberán abandonar Rusia antes del 17 de junio.
De acuerdo con el comunicado, la decisión ha sido tomada con base en "el principio de reciprocidad, así como en el artículo 9 de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas de 1961" y ha sido comunicada al embajador checo en Rusia, Vítezslav Pivonka.
Al diplomático se le manifestó que se trata de una medida en respuesta "a la acción provocativa de Praga, que se tomó sin ninguna base sólida, algo lo que admiten las propias autoridades checas".
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- Según el primer ministro, Andrej Babis, los dos trabajadores estarían supuestamente vinculados con los reportes no confirmados sobre la importación al territorio checo del veneno ricina
El futuro de las relaciones con Praga
Moscú ha señalado que la expulsión de dos funcionarios rusos "confirma que la línea de agravamiento de las relaciones con Rusia ahora se ha elevado al rango de política estatal". "Tendremos este desarrollo de situación en el contexto general de nuestras relaciones con la República Checa", concluye el comunicado.
Por su parte, el portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, ha asegurado que Moscú no puede "permanecer indiferente y tolerar las manifestaciones hostiles por parte de Praga", por lo que "cada vez responderemos de forma adecuada".
Al mismo tiempo, el representante del Kremlin ha añadido que Rusia en lo sucesivo tiene "interés en forjar y mantener relaciones buenas, de socios y mutuamente beneficiosas con la República Checa", y ha subrayado que este principio se aplica a todos los Estados europeos".
Anteriormente, la Embajada de Rusia en la República Checa calificó la decisión de Praga de "una provocación fabricada".
"Este paso hostil, que desde el principio se basó en acusaciones en los medios de comunicación no confirmadas, demuestra la falta de deseo en Praga de normalizar las relaciones ruso-checas, que se han degradado recientemente, no por nuestra culpa", aseveró la misión rusa en este país centroeuropeo.
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