El expresidente interino de Argentina, Eduardo Duhalde (2002-3003), aseguró que sus advertencias sobre un posible golpe de Estado en Argentina, las cuales generaron una oleada de repudio en su contra, fueron producto de la alteración de su personalidad provocada por la pandemia de coronavirus.
"La pandemia produce actitudes psicóticas, un desenganche de la realidad y, nunca como ahora, ves gente que dice cosas que en su sano juicio no las diría", dijo luego de que esta semana fuera el centro de una polémica en la que líderes políticos y sociales reafirmaron su compromiso con la democracia.
"Quiero decirles a mis hijas que yo no estoy exento de tener esos temas psicóticos. A mí me puede pasar. No me reconozco diciendo lo que dije, me desenganché de la realidad, como un flash", explicó Duhalde en un programa televisivo.
También aseguró que, como él mismo tiene pánico a un golpe de Estado y ve el avance del militarismo en América Latina, empezó a tener más temores en ese sentido. "Eso evidentemente produce en mí ese efecto. Mi hija le dijo a mi nieta, papá tuvo un desenganche de la realidad y dijo lo que no tenía que decir", reconoció.
"No va a haber elecciones"
La controversia comenzó el martes por la noche, cuando el expresidente afirmó que las elecciones legislativas del próximo año se suspenderán porque los militares tomarán el poder en el país para interrumpir al gobierno de Alberto Fernández.
"No va a haber elecciones porque Argentina es la campeona de la dictaduras militares. Por supuesto que puede haber un golpe", afirmó el exmandatario peronista al recordar que el país ha tenido como presidentes de facto a 14 dictadores.
"La gente no lo sabe o lo olvida. Quien ignore hoy que el militarismo se está poniendo de nuevo en pie en América es porque no conoce lo que está pasando", dijo al poner en duda los comicios legislativos de Argentina previstos para el 24 de octubre del próximo año, en los que se renovarán parcialmente las bancas de la Cámara de Diputados y del Senado justo cuando Fernández cumpla la mitad de su mandato.
"¿O no sabemos que en Brasil hay un gobierno democrático cívico-militar? ¿o no sabemos lo que es Venezuela, lo que es Bolivia? Sabemos que en Chile las redes y los movimientos han puesto de espaldas al gobierno y quedan nada más como factor de poder el Ejército y los carabineros", señaló.