La cantante Adele es criticada por "apropiación cultural" tras posar con un bikini de bandera jamaiquina y peinado afrocaribeño
La cantante británica Adele ha desatado controversia en la Red, donde ha sido acusada de "apropiación cultural" luego de que compartiera una fotografía posando en un bikini con los símbolos de la bandera de Jamaica y luciendo un peinado afrocaribeño.
Adele, de 32 años, acudió a Instagram para conmemorar este fin de semana lo que habría sido el carnaval de Notting Hill, una popular celebración que se lleva a cabo cada agosto en las calles de ese barrio londinense, pero que este año tuvo que limitarse a eventos en línea debido a la pandemia del coronavirus.
"Feliz lo que habría sido el carnaval de Notting Hill, mi amado Londres", escribió la celebridad junto a una imagen en la que posa con un peinado tradicional africano conocido como 'nudos bantú', popular entre las culturas afrocaribeñas.
Inmediatamente, el nombre de Adele se convirtió en tendencia en la Red y su publicación recibió múltiples críticas señalando que ese peinado era "totalmente innecesario" y exigiendo a la artista que "dejara de apropiarse de la cultura negra".
"Como si el año 2020 no pudiera ser más extraño, Adele nos está dando una apropiación cultural que nadie pidió", lamentó el periodista Ernest Owens en Twitter.
Pese a las críticas recibidas por la cantante, la publicación acumuló más de 4 millones de 'me gusta' y varias celebridades dieron su visto bueno a su 'look', como la supermodelo Naomi Campbell, cuya madre es jamaicana, y el músico jamaicano Popcaan, que respondieron al mensaje con una serie de emoticones.
Mientras tanto, otros usuarios simplemente aprovecharon la oportunidad para hacer memes y bromas sobre el nuevo peinado de Adele comparándolo con el de distintos personajes de dibujos animados.
this is all i could think when i saw the adele pic pic.twitter.com/9tiduCuXoh
— Jessica Blankenship (@blanketboat) August 31, 2020
adele said: pic.twitter.com/TKRfsCALAH
— c (@chuuzus) August 30, 2020
Este carnaval fue creado en 1958 en Londres por inmigrantes de las colonias británicas del Caribe y en 1964 se celebró por primera vez en las calles de Notting Hill. Desde entonces, se ha convertido en una gran fiesta anual de la cultura caribeña que atrae a centenares de miles de personas con sus danzas, disfraces pintorescos e intervenciones de bandas musicales.