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Acusan de crimen de odio a un cliente que pidió una banana a la mesa de un hombre negro en un bar
La víctima recibió la fruta en un plato, junto a un recibo que marcaba "postre", como concepto.
El pasado viernes, un joven de 20 años fue declarado culpable de un crimen de odio por enviar —usando una aplicación móvil— una banana a la mesa de un hombre negro mientras disfrutaba de una bebida en un bar de Londres (Reino Unido), informan medios locales.
El tribunal de magistrados de Bexley, en Londres, declaró culpable a Louie Kincella, el pasado 11 de septiembre, por "un delito agravado racialmente", de acuerdo a la Ley de Orden Público.
Wetherspoons customer who ordered a banana to the table of a black man using pub app is convicted of racism https://t.co/6fv7vHLl3d
— The Sun (@TheSun) September 16, 2020
El hombre deberá pagar un total de 1.220 libras esterlinas (cerca de 1.580 dólares): 600 en concepto de multa y 620 de las costas del juicio.
Lo ocurrido
El hecho tuvo lugar el pasado 8 de noviembre de 2019. Mark D'arcy-Smith, se encontraba en un pub con un amigo tomando una copa después del trabajo, cuando un camarero le trajo un plato con una banana y un recibo en el que estaba escrito "postre" y que marcaba 30 peniques.
Louie Kincella, sent a banana to a black man's table has been found guilty of a hate crime.He was handed a £600 fine, and was ordered to pay costs of £620 in addition to the fine.https://t.co/LyUoqs9WEH
— Gurpal Virdi (@gurpalsvirdi) September 16, 2020
El confundido joven, explicó al personal que ni él ni su amigo habían pedido la fruta, entonces el mesero explicó que el local había recibido un pedido por medio de la aplicación móvil del sitio, pidiendo el plátano para la mesa número 102, donde estaban sentados.
"Cuando enviaron el banano a mi mesa, el hecho de que no pudiera ver quién lo envió me hizo sentir todo tipo de emociones a la vez: ira, miedo, ansiedad, confusión. También me sentí realmente incómodo e inseguro en el pub", declaró D'arcy-Smith a Evening Standar.
Tras lo ocurrido, la víctima acudió a la Policía puesto que el local no tomó el incidente con la suficiente seriedad.
Posterior a la denuncia, Kincella fue detenido el 17 de enero y acusado formalmente el 3 de abril. Más tarde admitió estar en el pub y pedir la fruta, pero indicó que lo había hecho "de broma" .
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