La minga indígena, que llegó a Bogotá el domingo, comienza este lunes sus movilizaciones en la capital colombiana en demanda de una reunión con el presidente de Colombia, Iván Duque, y en rechazo a la violencia que afecta a los territorios de los pueblos originarios.
Se prevé que hoy, desde las 8:30 (hora local) de la mañana, los manifestantes se desplacen desde el Palacio de los Deportes, donde se han albergado, hasta la Plaza de Bolívar, principal sitio histórico de la ciudad, ubicado en el centro bogotano.
Esta gran movilización, compuesta por unas 8.000 personas, salió el pasado 10 de octubre del departamento del Cauca con destino a Cali, capital del Valle del Cauca, donde esperaban sostener un encuentro con el mandatario que no se llevó a cabo. Ante la ausencia de Duque, que envió una parte de su gabinete a esa ciudad, decidieron desplazarse a la capital del país para exigir la reunión.
Recibimiento en Bogotá
Tras recorrer más de 600 kilómetros, la minga arribó la mañana del domingo a la capital colombiana donde fue recibida por cientos de personas entre aplausos, pancartas y vítores. Se espera que también participe en el paro nacional convocado para el próximo miércoles.
La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, hizo el recibimiento de la manifestación, compuesta por movimientos indígenas, campesinos y afrodescendientes, y ofreció la logística y las garantías para que se lleve a cabo de manera pacífica.
Los desplazamientos de la minga dentro de la capital estarán fuertemente custodiados por el Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) de la Policía Nacional de Colombia, que ha sido cuestionado por su actuación durante las protestas de 2019 y 2020 en el país.
Por su parte, el mandatario colombiano ha reaccionado ante el exhorto de la minga para sostener una reunión, argumentando que su Gobierno es "dialogante" y que "busca siempre el entendimiento armonioso, sin amenazas, ni ultimátums".
Las demandas
En un comunicado de la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC), que también forma parte de la minga, se exige que se respete el derecho a la protestas con "plenas garantías" y se afirma que "los problemas y conflictos son posibles de resolver con más democracia y menos represión, con respeto por el otro y no con estigmatización y discriminación".
"Colombia camina por un filo peligroso, la criminalización de la protesta social así lo evidencia, por tanto, es urgente juntar nuestros pensamientos para tejer una salida democrática y consolidar la Paz con justicia social", dice el texto.
Entre las peticiones de esta movilización, que se llevó a cabo por primera vez en 2008, se encuentran temas como la exigencia de garantías por parte del Estado ante el aumento de la violencia; el cumplimiento de los acuerdos de paz con las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y la restitución de las tierras que han sido arrebatadas por trasnacionales y grupos ilegales armados.
40 líderes indígenas asesinados en 2020
Este año, a pesar del confinamiento por la pandemia, por lo menos 40 líderes indígenas fueron asesinados hasta junio pasado. Por su parte, la ONIC eleva esta cifra hasta los 242 homicidios desde la firma de los acuerdos de paz, en 2016.
La situación de la violencia en los resguardos indígenas ha sido catalogada de "exterminio sistemático" en medio de masacres y asesinatos de sus líderes sociales.
Debido a los enfrentamientos por el control territorial entre organizaciones criminales y el Ejército, los miembros de las comunidades han tenido que desplazarse forzadamente.