Pobladores del estado mexicano de Michoacán cavan zanjas en carreteras para detener el asedio del Cártel Jalisco Nueva Generación
Habitantes de Coalcomán y Tepalcatepec, en el estado mexicano de Michoacán, destruyeron las carreteras estatales que conectan a estas comunidades con Jalisco con el objetivo de detener a los vehículos del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Según los pobladores, caravanas conformadas por integrantes de esta organización criminal llevan semanas asediando sus localidades en medio de una disputa con otros cárteles.
Las zanjas fueron hechas con maquinaria pesada a la altura de las comunidades La Limonera y La Pinolapa.
Mientras @AlfonsoDurazo asegura que el narco ya no domina ninguna zona del país, en Coalcomán, Michoacán los habitantes tuvieron que destruir los caminos que comunican al pueblo para impedir el avance del CJNG, quien ya los atacó 9 veces en la semana con extrema violencia. pic.twitter.com/jDAFC431yu
— Daniel Rangel 🇲🇽 (@DannyRangelGDL) November 17, 2020
Disputa por el control territorial
El pasado fin de semana, el cártel dirigido por Nemesio Oseguera 'El Mencho' incendió al menos once vehículos sobre carreteras de la región de Tierra Caliente, donde se realizaron las zanjas. No ha sido el único ataque. En la última semana, se han registrado varios asaltos contra la población de Coalcomán.
Con esto, el grupo criminal se ha apoderado de varias comunidades, introducido armamento y personas a su servicio en poblaciones colindantes con el estado de Jalisco, con el fin de asegurar una ruta de trasiego de drogas desde las costas de Michoacán hasta la principal zona de influencia del cártel.
De acuerdo con versiones de habitantes de la región, recogidas por algunos medios mexicanos como El Universal, el CJNG ha instalado uno de sus principales cuarteles en la localidad de Aguililla, donde se concentran buena parte de los vehículos que merodean la región de Tierra Caliente.
Durante meses, integrantes de esta organización criminal y los Cárteles Unidos han librado una batalla por el control territorial de la región. Esta situación ha generado que muchas familias hayan huido a otras ciudades, ante el miedo y la inseguridad que prevalece en la zona.