El FSB tacha de falsa la supuesta conversación telefónica de Navalny con uno de sus agentes

El Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB) ha declarado que el video publicado este lunes por Alexéi Navalny, titulado 'Llamé a mi asesino. Lo confesó todo', en el que el opositor ruso habla con un supuesto agente que estaría involucrado en su envenenamiento, Konstantín Kudriávtsev, "es una falsificación" y "provocación planificada para desacreditar al FSB de Rusia y a los funcionarios del Servicio Federal de Seguridad, lo que no habría sido posible sin el apoyo organizativo y técnico de los servicios de inteligencia extranjeros".

"El uso de la suplantación de identidad por teléfono es una técnica bien conocida de los servicios de inteligencia extranjeros, que se ensayó muchas veces antes en acciones antirrusas, permitiendo excluir la posibilidad de identificar a los participantes reales de la conversación", ha afirmado el FSB en un comunicado.

El organismo ya ha iniciado una investigación y ofrecerá una evaluación al respecto tan pronto como tenga resultados.

En la llamada telefónica, hecha pública por Navalny, el político ruso se presentó como ayudante de Nikolái Pátrushev, secretario del Consejo de Seguridad de Rusia y exdirector del FSB, y habló durante unos 45 minutos con "Konstantín Kudriávtsev", un supuesto agente del FSB que, según Navalny, participó en su envenenamiento con un agente nervioso del grupo Novichok en agosto.

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Navalny le dijo a su interlocutor que necesitaba aclarar unos detalles de la operación para preparar un informe para sus superiores y utilizó un programa "usado por bromistas" para ocultar su número de teléfono, suplantándolo por un número del conmutador con el que los agentes del FSB se ponían en contacto.

Así, "Kudriávtsev" contestó un número conocido que inmediatamente relacionó con su trabajo y se puso a hablar, suponiendo que el fracaso de la operación del envenenamiento de Navalny se debió al aterrizaje demasiado rápido del avión en Omsk y el rápido actuar de los médicos de la ambulancia en el aeropuerto.

Además, contó que había limpiado la ropa de Navalny de restos de Novichok, poniendo atención especial a los puntos de la parte interior de sus calzoncillos, según la orden que le había dado el agente del FSB Stanislav Makshakov.

La conversación de Navalny con el supuesto agente del FSB tuvo lugar el 14 de diciembre por la mañana, horas antes de la publicación de una extensa investigación periodística de Bellingcat, The Insider y otros medios que concluyó que detrás del envenenamiento del político ruso estaba un grupo de agentes del Servicio Federal de Seguridad de Rusia. Putin tachó la investigación de "legalización de materiales de los servicios de inteligencia estadounidenses" y negó la responsabilidad del Estado por lo que le pasó a Navalny.